A partir de mañana, jueves 5 de noviembre, estarán disponibles en Netflix los cuatro episodios Carmel: ¿Quién mató a María Marta?, miniserie documental que lleva la firma de la experimentada productora Vanessa Ragone y que se mete de lleno en uno de los casos policiales más resonantes y misteriosos de las últimas décadas.
¿Fue el asesinato de María Marta García Belsunce un femicidio, un complot familiar, un robo común…?
Tras haber visto los cuatro episodios (de una hora de duración cada uno), podemos decir que todas esas hipótesis irán apareciendo en Carmel junto con los testimonios de los principales implicados: su marido (y preso durante 6 años por encubrimiento), Carlos Carrascosa, sus hermanos, sus amigas y muchas de las autoridades judiciales y policiales que intervinieron en la causa.
Y ahí aparece quizá el primer rasgo destacado de la serie: están todas las principales voces del caso, incluido el personaje que históricamente más se buscó: Carrascosa, quien asume su lugar de “entrevistado deseado” y despliega toda su personalidad, su "parco histrionismo" y, por supuesto, su versión de los hechos.
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No es casual, de hecho, que por estos días también haya salido su libro de memorias, titulado, bien eufemísticamente, Diario de un inocente.
La justica, claro, le ha dado la razón en su inocencia y es por eso que no sólo está en libertad, sino que también puede reclamar (como ya confirmó que hará) una indemnización al Estado y al Poder Judicial por sus más de 6 años en prisión (por encubrimiento y también por homicidio agravado por el vínculo).
“Robo Común". Esa es la hipótesis central de Carrascosa para explicar un asesinato que, al día de hoy, a más de 18 años de ocurrido, sigue sin una respuesta definitiva. La hipótesis, compartida por muchos miembros de la familia, será algo explorada por el documental, pero nunca de manera exhaustiva y terminante, un poco por limitaciones obvias y otro poco por cuestiones legales (para la familia, el principal sospechoso del robo y asesinato sigue siendo el vecino “descarriado” del Carmel, Nicolás Pachelo).
Del otro lado de espectro está Diego Molina Pico, el fiscal que más hizo por detener a Carrascosa y llevarlo a juicio y con quien mantiene al día de hoy una especie de enemistad eterna.
Molina Pico se hace cargo de ese antagonismo y a lo largo de los 4 episodios sostendrá a capa y espada su versión y accionar, aun contra la opinión de sus colegas que ordenaron la absolución total de quien fuera el único acusado detenido del caso.
¿Es entonces una especie “elige tu propia aventura"? Un poco sí, y eso es quizá lo más endeble del documental, ya que por momentos es brillante en la reconstrucción de hechos -el “croquis”, los llamados y la actuación de cada uno de los implicados, así como el devenir de la investigación inicial-, pero ninguno de ellos conduce a ninguna parte.
Síndrome compartido quizá con el otro gran documental de Netflix sobre los enormes agujeros negros de la justicia argentina -El Caso Nisman- por lo que no es alocado preguntarse si no estaremos inaugurando desde esta pequeña comarca al sur todo un subgénero en el mundo del streaming…
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