Qué son las parejas DINK, un modelo de familia que ya se instaló entre los millennials

Si bien no se trata de un fenómeno nuevo, las parejas DINK ya son un modelo de familia moderno, como alternativa al modelo de la familia tradicional. Esta tendencia creciente alrededor del mundo se basa en dos adultos con trabajos remunerados y sin el deseo de tener hijos. Descubrí los motivos para elegir este modo de vida y las características más comunes de quienes lo eligen. 

El término DINK surge de sus siglas en inglés "Dual Income, No Kids" (doble ingreso, sin hijos). Se trata de un fenómeno del que se comenzó a hablar hace más de una década, pero que se convierte en una elección creciente especialmente entre la generación de los millenials.

En este modelo alternativo de familia, ambos integrantes de la pareja cuentan con empleos, generalmente bien remunerados y, por decisión o no, no tienen hijos a cargo. Por eso, destinan sus ingresos a actividades de esparcimiento y gustos varios. 

La mayor parte de las parejas DINK se suelen dar en personas de entre 25 y 39 años, algunas casadas o tan solo convivientes. Al no tener que preocuparse por las necesidades de hijos a cargo, cuentan con tiempo para hacer más actividades en pareja o incluso tomarse un tiempo para disfrutar en soledad. 

Características de las parejas DINK

Este tipo de relaciones suelen estar formadas por individuos con determinadas características e intereses, lejanos al deseo tradicional de gestar o criar hijos en conjunto. Estas son algunos de sus rasgos principales: 

-Asumen un  gran compromiso con su actividad profesional, ya sea un oficio, trabajo o profesión específica. 

- Dan valor a lo académico y a la actualización permanente de conocimientos y herramientas. 

- Invierten parte de sus ingresos en su estética y salud (tratamientos estéticos, masajes, medicina alternativa, etc). 

- Optan por lo lúdico y el consumo relacionado al placer personal o de pareja. 

- Puede llegar a ser egocéntricos. 

No siempre se trata de adultos que no puedan asumir compromisos o responsabilidades, ya que muchos tienen argumentos sólidos para no tener hijos más allá de disfrutar de su tiempo de ocio. 

Los motivos para no tener hijos

Las razones para mantenerse como familias de dos personas y no sumar hijos a la ecuación son variadas y pueden ir desde no tener la posibilidad de procrear, miedo a repetir errores cometidos por sus padres, priorizar la carrera profesional, no exponer a un niño a la crianza en este mundo desigual, entre otras. 

- La necesidad de desarrollo profesional y crecimiento de las mujeres es uno de los motivos, ya que pese a que las tareas se repartan aseguran que tener hijos siempre implica mayor responsabilidad para la gestante que para su pareja. 

- No se sienten realizados por ser madres o padres. 

- Prefieren poner en primer plano los proyectos personales (trabajo, viajes, descanso). 

- Creen que el mundo es un lugar hóstil e injusto para criar a un niño o niña. 

- Temen que la maternidad o paternidad repercuta negativamente en su pareja o vida sexual. 

- No confían en su capacidad para criar a un hijo o la de su pareja. 

- Temen perder sus espacios personales y su individualidad. 

- No les alcanza el dinero para mantener a un hijo o dudan de su estabilidad laboral, en un mundo en constante crisis.