El punto U femenino: una zona erógena poco conocida pero altamente placentera

El punto U femenino es una de las múltiples zonas erógenas del cuerpo de las mujeres. Su estimulación durante el acto sexual puede intensificar el placer de manera significativa. Aunque el origen de su nombre es debatido —algunos dicen que se refiere a la uretra, mientras que otros apuntan a la forma de una “U” invertida—, lo cierto es que es un área muy sensible y repleta de terminaciones nerviosas.

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¿Dónde se encuentra el punto U?

El punto U está ubicado entre el clítoris y la entrada de la vagina, alrededor de la uretra, que es el canal por donde se expulsa la orina. A cada lado de la uretra se encuentran las glándulas de Skene, responsables de conformar este punto erógeno. A diferencia del punto G o el punto A, el punto U no se encuentra dentro del canal vaginal, lo que lo hace accesible desde el exterior.

Estimulación del punto U: claves para disfrutar sin molestias

Debido a su sensibilidad, es fundamental estimular esta zona con delicadeza. Según expertos como la sexóloga María Fernanda Prieto, su sola estimulación no suele ser suficiente para alcanzar el orgasmo, pero puede potenciar las sensaciones cuando se combina con la activación de otras zonas erógenas, como el clítoris o el punto G.

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El coach sexual Charlie Beaular sugiere incluir la estimulación del punto U como parte de los juegos previos, utilizando dedos, lengua o juguetes sexuales. También se pueden probar posiciones sexuales que fomenten el roce con esta área, ya que muchas posturas diseñadas para estimular el clítoris también benefician el punto U debido a su proximidad.

El rol del punto U en la eyaculación femenina

El punto U desempeña un papel importante en la eyaculación femenina, un fenómeno que ocurre gracias a las glándulas de Skene. Durante la excitación, estas glándulas se hinchan y producen un líquido similar al de la eyaculación masculina, favoreciendo la lubricación antes y durante las relaciones sexuales.

Algunos estudios indican que este líquido contiene antígeno prostático específico (PSA), una proteína también segregada por la próstata masculina. Por este motivo, las glándulas de Skene son conocidas como la “próstata femenina”.

Más allá de su función erótica, las glándulas de Skene contribuyen a la salud urinaria. Según la Clínica de Cleveland, producen una sustancia que lubrica la uretra, facilitando su apertura al orinar, y que además posee propiedades antibacterianas, protegiendo contra infecciones urinarias.

Consejos para estimular el punto U

A la hora de excitar esta zona, es esencial comenzar con suavidad y aumentar la intensidad gradualmente. La estimulación demasiado fuerte puede causar incomodidad. Incorporar esta área en los juegos previos o combinarla con la activación de otras zonas erógenas puede ser la clave para una experiencia más placentera.

Explorar el punto U no solo enriquece la intimidad, sino que también abre las puertas a una mayor conexión con el propio cuerpo y el de la pareja, permitiendo descubrir nuevas formas de disfrutar la sexualidad.