Se despedía el siglo XX, y Madonna ya tenía por demás ganada la corona de reina absoluta del pop. Con 42 años parecía, para cierta gente, que ya lo había hecho todo… Su último disco había sido nada más ni nada menos que Ray Of Light (1998), ganador de tres premios Grammy y ventas millonarias en todo el mundo.
Pero… La cantante de “Deeper and Deeper” no pensaba parar, a pesar de competir con grandes íconos teens del momento como Britney Spears y Christina Aguilera.
Mientras Madonna investigaba para lanzar su octavo álbum, escuchó un demo que había enviado Mirwais Ahmadzai, productor y compositor suizo, a su sello discográfico Maverick Records y la respuesta a su búsqueda estaba allí: “Esto es el sonido del futuro”.
Así fue como la compositora de “Secret” se reunió para conocer a Mirwais y tres semanas después estaban trabajando junto al músico inglés William Orbit (Ray Of Light), el británico Guy Sigsworth (Björk), Mark Stent (Janet Jackson) y Talvin Singh (Siouxsie and the Banshees).
Con grabaciones en Londres, Los Ángeles y Nueva York el resultado del trabajo fue “Music”, un disco de once canciones funk pop electrónicas. En la tapa la reina del pop se inspiró en el oeste estadounidense y lució un estilo cowgirl que fue constante a lo largo de toda su promoción.
El primer sencillo fue el tema del mismo nombre del álbum, donde la empresaria apostó todo desde un principio con una voz distorsionada: “Hey Mr. DJ, put a record on...I wanna dance with my baby”, rememorando la época disco. La canción se mete de lleno en tu piel y sabés que es un hitazo…ya clásico.
El videoclip está inspirado en los ochenta, época en la que Madonna, la actriz Debi Mazar y su corista eterna Niki Haris (que aparecen en el video) recorrían los clubes de Manhattan en busca de diversión. También mezcla el concepto “Ghetto Fabulous” (imagen popularizada por el rap del momento, como la de Lil´Kim y Mary J.Blige) y eligió como chofer de la limusina al cómico londinense Ali G, quien insultaba a políticos británicos del momento en un programa de televisión.
En plena filmación la autora de “Las Rosas Inglesas” estaba embarazada de cuatro meses de su segundo hijo Rocco (fruto de su relación con el cineasta británico Guy Ritchie) y se la muestra yendo a bailar coqueteando con mujeres para luego terminar en un club de desnudistas, algo normal en su vida, ya que suele ir a buscar bailarinas exóticas para sus shows en la noche nocturna estadounidense.
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Para sacarle dramatismo a los comentarios machistas, la reina del pop bromeó que a su hijo le iba a poner “Niño Jesús”. En el video también está caricaturizada como una heroína defendiéndose de hombres violentos, mientras de fondo aparecen los nombres de todos sus éxitos.
Todo termina en una fiesta de sólo mujeres dentro de una limusina, casi como su babyshower. ¿Quién dijo que las mamis no podían divertirse?
A pesar de que “Music” debutó en el puesto número uno en 15 países, su videoclip fue censurado por MTV. Lo que no pudieron censurar es que el tema sea uno de los más populares del repertorio de la actriz de “The Next Best Thing” hasta el día de hoy: “La música mezcla a la burguesía y a los rebeldes”.
Le sigue la canción “Impressive Instant”, llena de energía futurista y flashes que no tienen sentido como cuando te eclipsás de amor: “Eres el que he estado esperando, ni siquiera sé tu nombre”, canta una Madonna confundida y robótica. En “Runaway Lover” alerta sobre los amantes fugitivos y no entregarse a ellos. La melancólica balada “I Deserve It” (dedicada obviamente a Guy Ritchie) que vale la pena escuchar y emocionarse. La quinta del álbum es “Amazing”, un poco cursi, pero pegadiza al final (también dirigida a Ritchie).
Para “Nobody's Perfect” la cantante sorprendió al mostrarse tan enamorada del director de “Snatch” al punto de pedirle perdón...casi suplicante, nunca la hemos visto así, ni siquiera cuando estuvo casada con Sean Penn.
Le sigue “Don´t Tell Me”, compuesta por Mirwais y su cuñado músico, Joe Henry (marido de su hermana Melanie Ciccone), en donde al principio parece un disco que se rayó...pero no. El video se destaca por su coreografía y por el famoso movimiento de la reina del pop en el toro mecánico que todos quisimos imitar en algún momento. En 2014 el tema se terminó de inmortalizar en el Unplugged de Miley Cyrus con un mashup excitante de We Can´t Stop: “Por favor no me digas que pare”, cantaron juntas.
“What It Feels Like for a Girl” causó revuelo, no tanto por su letra sino por su videoclip (en su versión remix) tildado de violento. La compositora se muestra en un hotel escapando, con un look rudo, con corte carré lacio, tatuajes, moretones, guantes de cuero y con ropa que bien podría ser como la del asesino de ficción Michael Myers; mientras se pone un aro que dice LADY y unos stilettos.
En el transcurso de ese pantallazo se escucha la famosa frase de la actriz Charlotte Gainsbourg en la película The Cement Garden (1993): “Las chicas pueden usar jeans y cortarse el pelo corto, usar camisas y botas porque está bien ser un chico. Pero que un chico parezca una chica es degradante, porque piensas que ser chica es degradante. Pero secretamente te encantaría saber cómo es, ¿no es así?”.
No todo termina allí, ya que Madonna se roba un auto amarillo (muy llamativo) y pasa a buscar a su abuela senil. Choca el vehículo de unos hombres que la miran con un deseo asqueroso, harta del acoso callejero. Después ataca a un hombre con una picana en un cajero automático y se lleva su dinero para comprar papas fritas y hamburguesas.
Dos policías la miran con desconfianza, amenazantes y ella les raya el auto, los apunta y dispara con un arma de la cual sale agua y huye atropellando a otros hombres que juegan al hockey. Termina robándose un automóvil rojo en una gasolinera, derriba a su dueño, incendia una bomba de gasolina y en un segundo escape se estrella contra un poste de luz.
El video fue dirigido por Guy Ritchie y fue censurado por MTV (sí, otra vez), el video sólo se podía transmitir de madrugada, mientras que en otras partes del mundo ni siquiera fue proyectado. “Mi personaje representa una fantasía y hace cosas que las mujeres no pueden hacer. Es una canción furiosa”, explicó la actriz de “Swept Away”. En Argentina el tema llegó al puesto número tres en un ranking de 100.
“What It Feels Like for a Girl” había sido dedicada originalmente a Britney Spears y tuvo su versión en español: “Lo Que Siente La Mujer”, que la reina del pop la cantó en vivo en su Drowned World Tour (2001) rodeada de bailarinas en una coreografía sorora inolvidable. Hace 10 años la canción fue reivindicada por los chicos de Glee en el capítulo número 15 llamado: “The Power Of Madonna”.
“Paradise (Not for Me)” es un tema con partes cantadas en francés que aún hoy es una rareza musical. Le sigue la triste “Gone”, que vale poner para cualquier domingo. El disco finaliza con la famosa “American Pie” (cover de la original setentosa de Don McLean, pero más corta) en donde la autora de “Mr. Peabody's Apples” realizó un videoclip con la bandera estadounidense de fondo, vestida con un simple jean, una musculosa y una tiara. Mientras baila aparecen distintas personas de su país representativas de su cultura, incluso parejas gay besándose y muestra su cola al mejor estilo Bart Simpson mientras juega con su amigo británico Rupert Everett (quien realizó los coros de la canción).
En junio de 2001 la reina del pop realizó su quinta gira, “Drowned World Tour”, después de estar ocho años fuera de los escenarios. Agotó todas sus entradas y recaudó 75 millones de dólares convirtiéndose así en la número uno en la lista de los diez conciertos con más ventas de la revista Billboard.
Sus estilos en el show variaron entre punk, geisha, cowgirl y latin-gueto, ya que eran sus dos últimos álbumes (“Ray Of Light” y “Music”) los que presentaba y eran muy distintos el uno del otro. En el concierto la empresaria fue muy activa tanto bailando como tocando guitarras. "No veo el propósito de hacer un show a menos que ofrezcas algo que te haga perder los sentidos. No es suficiente subir al escenario y cantar una canción. Se trata de teatro, drama, sorpresas y suspenso”, expresó.
Sus performances se destacaron como de alto impacto ya que en temas como “Mer Girl” lucha contra hombres y se muestra golpeada y sangrando, luego vuela en el aire en “Sky Fits Heaven” y no se iba a perder de generar polémica de nuevo con “What It Feels Like for a Girl”, en un interludio con escenas de la película japonesa “Perfect Blue” (1997) en donde hay una escena de violación en masa a una chica.
El DVD “Madonna Live! Drowned World Tour” fue filmado en Michigan, donde la cantante de “Nothing Really Matters” nació. Fue emitido por HBO donde tuvo 5, 7 millones de espectadores y se convirtió en el concierto más visto en la televisión desde 1997.
El reconocimiento fue pobre por no decir ignorado en cuestión de premios. La reina del pop sólo recibió dos MTV Europe Music Awards a “Mejor Baile” y “Mejor Artista Femenina”. En Sudamérica sus fans entendieron mejor la importancia de lo que quiso transmitir la compositora de “Hollywood”: en Brasil “Music” fue certificado en Oro y en Argentina de Platino.
La amiga y confidente de Madonna, Rosie O´Donnell, se refirió al respecto: “Nunca la he visto más feliz, más centrada, más capaz de dejar atrás su faceta de estrella”. Sólo que el resto del mundo no le prestó atención...buscaban más estrellas y menos introspección de una mujer madura.
No pasaría mucho tiempo para que la cantante, compositora, actriz e ícono global tome su revancha, en 2003 lanzó American Life. Pero ese es otro capítulo tortuoso de su historia…
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