Eva Perón usó la moda como herramienta política: de Christian Dior a Jacques Fath y Salvatore Ferragamo

María Eva Duarte de Perón es un personaje que no ha pasado desapercibido tanto en Argentina como en el mundo y se ha convertido con los años en un ícono de las mujeres en Latinoamerica. Desde películas, pasando por temas a una gran cantidad de libros, la vida de la "abanderada de los humildes" ha sido motivo de interés político y cultural alrededor del globo. Su relación con la moda y el uso político que hizo en su corta vida de las prendas que lució es el tema que analiza el libro de ensayos Evita frente al espejo. 

La referente argentina de la política social, quien supo despegarse de su simple rol de primera dama, fue amada por muchos y odiada por otros tantos. Pero nunca quedó al margen de las miradas o análisis de la realidad argentina y de la región. 

El libro de una Eva como referente del uso político de la moda

En el libro recientemente publicado  Evita frente al espejo: ensayos sobre moda, estilo y política en Eva Perón (Ampersand, 2023), se genera un repaso por la figura de la también actriz a través de sus decisiones estéticas y de moda, bajo la mirada de algunos de los expertos más reconocidos del estilo y la alta costura nacional.

 “Para la oligarquía, Perón era una vulgar, arribista, no sabía vestirse, pero no era cierto, la ropa le permitió surfear los prejuicios de la clase social”, ha explicado el editor y autor del libro, Marcelo Marino, en la presentación del libro en Madrid.

Pese a tener un discurso con un fuerte peso social, la moda siempre fue parte del manifiesto político y la visión particular de la realidad que tenía la joven Eva Perón. 

Eva Duarte no salió de una cuna de oro, por lo que la ropa significó en un comienzo para ella en una forma de superar los prejuicios social y demostrar su claro ascenso social. Es importante destacar que ser actriz en la época en la que vivió no era una actividad bien vista y mucho menos lo fue el haberse unido a un militar como Juan Domingo Perón en segundas nupcias.

Eva llegó a Buenos Aires a sus 16 años y rápidamente se convirtió en una actriz y modelo, espacios donde tuvo su primer contacto con la moda y esto le permitió comprender el poder de estar bien vestida.En esos primeros años, según relata el libro, Perón se apoyó en modistas, colaboradoras y asistentes que la ayudaron a crear su propio estilo.

Más adelante, en lo que fue su corta pero fructífera carrera política, que le permitió trascender el tradicional rol de la primera dama, Evita comprendió que la  forma de vestir podía ser parte de su discurso político y social. en su carrera política la moda se volvió un instrumento político. Un momento bisagra para esta joven Eva fue la gira que realizó por Europa en 1947, la cual fue impulsada por cuestiones internas del gobierno peronista.

Una de las autoras, Laura  Zambrini, destaca: “Una mujer tan joven y bella como ella atrajo masas, y esto le dio mucha visibilidad. Fue realmente disruptivo para la época”.

Cuando llegó a la Europa de la posguerra, Eva Perón descubrió a las grandes firmas de lujo y alta costura y comienza a interesarse por lucir esos diseños. Esas mismas casa después la buscarían para vestirla.  La entonces primera dama comenzó a lucir diseños de Christian Dior, Jacques Fath y calzado de Salvatore Ferragamo.

Fue en ese momento en el que adoptó su caracteristico peinado del rodete, según se explica en "Evita frente al espejo...",una estética característica que junto a prolija cabellera rubia se convirtió en marca característica de su persona. 

Marcelo Marino, editor y autor del libro, explicó que la relación de Eva Perón con el lujo y el discurso en defensa de los más humildes es, hasta la fecha, una de las grandes contradicciones que encuentran sus detractores. “No es fácil encontrar otro nombre que le haya dado a la alta costura este uso tan intensamente político y a la vez tan trascendente”, aseguró. 

Pero los autores de los ensayos del libro coinciden en la creencia de que sus cambios de vestuario estaban cuidadosamente estudiados y se adaptaban a cada actividad o situación que debía vivir como parte de su agenda.

Un ejemplo que destacan fue su viaje a España en plena primavera, en el que sorprendió al aparecer con un abrigo  de piel, pese al clima templado. Marino lo considera un "acto brillante":  “La moda es romper esquemas, y ella quería hacerlo en Madrid”. En la otra vereda, están quienes critcaron el hecho de ostentar lujo en un país diezmado por la Segunda Guerra Mundial. 

Presentación del libro sobre Evita

En el marco de la presentación de Evita frente al espejo: ensayos sobre moda, estilo y política en Eva Perón también se realizó un desfile en el que el diseñador argentino Pablo Ramirez mostró una colección de 16 trajes sastreros y vestidos de gala inspirados en la estética de la primera dama, los cuales fueron acompañados de tacos, el icónico rodete y los prendedores que solía lucir. 

La directora de Ediciones Ampersand, Ana Mosqueda, explicó en el evento que la intención de este trabajo fue la de comprender a un personaje de la talla de Eva Duarte de Perón en todas sus aristas, sin caer en el lugar común de considerar la moda como algo frívolo.  Y según los autores, el desafío más grande fue el escribir sobre una personalidad de la cultura y la política de la que se ha escrito tanto. “Nunca se había hablado tanto de la moda en el personaje”, aseguró Marino.