Sleeping Beauties: un recorrido por la muestra del Met

Cuando una prenda de vestir ingresa a la colección de The Costume Institute, su estado cambia irrevocablemente. Lo que alguna vez fue una parte vital de la experiencia vivida por una persona se convierte en una obra de arte sin vida que ya no se puede usar, oír, tocar ni oler”, explica Andrew Bolton, curador a cargo del departamento de Historia del traje del Museo Metropolitano de Nueva York. Fue ese el punto de partida de la nueva muestra Sleeping Beauties: Reawakening Fashion, una instalación inmersiva que busca reactivar las cualidades sensoriales de las prendas de la colección, a través del uso de diversas tecnologías que van desde la inteligencia artificial y las imágenes generadas por computadora, hasta los formatos tradicionales de rayos X, la animación, la proyección de luz y los paisajes sonoros y olfativos.  

La exposición, cuyo objetivo es ampliar la interpretación de la moda dentro de los museos desde lo meramente visual a lo multisensorial y participativo, se organiza en función de tres grandes grupos vinculados con la naturaleza: tierra, aire y agua. De esta forma, los 220 vestidos y accesorios exhibidos se dividen entre motivos florales, hojas y follaje, pájaros e insectos, peces y conchas marinas y se erigen como casos de estudio en torno a un vestido rector: las “Bellas Durmientes”, ni más ni menos que vestidos tan antiguos, que ya no pueden mantenerse sobre un maniquí. En cambio, se exhiben en ‘ataúdes’ de vidrio – réplicas de aquel donde descansaba la heroína de Disney- para que los visitantes puedan analizar su magnificencia y su estado de deterioro.

 

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“En muchos sentidos, la naturaleza sirve como metáfora de la moda: su renacimiento, renovación y carácter cíclico, así como su fugacidad y evanescencia”, comenta Bolton y agrega que, estas últimas cualidades, son las que se evidencian en las “bellas durmientes” que dan nombre a la exhibición. Ellas, las bellas prendas durmientes, son las que recuerdan que las modas pasadas, a pesar de estar destinadas a un sueño eterno dentro de las paredes del museo, no olvidan sus historias sensoriales. “Son estas historias incrustadas en las fibras mismas de su ser las que requieren reactivación a través de la mente y el cuerpo, el corazón y el alma de aquellos que están dispuestos a soñar e imaginar”, concluye el curador.

Durante el recorrido, el visitante puede experimentar cada uno de los tres mundos naturales a partir de iconografías representadas con distintas técnicas en las prendas expuestas: desde vestidos y sombreros con variedad de flores y la posibilidad de oler sus perfumes en tubos de ensayos, hasta la reproducción hiper realista de un vestido íntegramente bordado en su época original; Desde vestidos cuya silueta se asemeja a un insecto, como los creados a principios del siglo XX por Paul Poiret, hasta los vestidos “mariposa” cubiertos por un crisol de gasa que Charles James diseñó en 1955; Desde el vestido de almejas de Alexander McQueen, cuyos sonidos se reproducen en el ambiente, hasta las maquetas impresas en 3D que permiten “sentir” las texturas de los vestidos en vivo y en directo. Sleeping Beauties: Reawakening Fashion, fue inaugurada un día después de la gala anual del Met, a la que dio su nombre y Dress code, titulado “El jardin del tiempo”. La muestra estará abierta hasta el 2 de Septiembre de 2024.

La Gala del Met

El Instituto del Traje - The Costume Institute en su inglés original - comenzó como el Museo de Arte del Traje, una entidad independiente formada en 1937, y en 1946 se fusionó con el Museo Metropolitano para pasar a ser el Instituto del Traje. Desde entonces, el Costume Institute pasó por las manos de varios curadores, encargados de crear exposiciones memorables que posicionaron a la moda como un nuevo arte. Entre ellos, Diana Vreeland, con El mundo de Balenciaga, La gloria del traje ruso o Vanity Fair; Richard Martin, con muestras temáticas como Infra-Apparel, Waist Not, The Four Seasons y Cubism and Fashion o Rock Style; y Andrew Bolton, quien desde 2016 es el curador a cargo.

 

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Actualmente, la colección del Instituto del Traje está compuesta por más de treinta y tres mil objetos que representan siete siglos de vestimenta y accesorios de moda para hombres, mujeres y niños, desde el siglo XV hasta la actualidad. Siendo la colección más grande y completa del mundo, ofrece una cronología única sobre la historia de la moda occidental.

 

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El Costume Institute presenta dos exposiciones temáticas anuales cuya principal fuente de financiación es la famosa Gala del Met. Cada año, a principios de mayo, la gala convoca a las celebridades más glamorosas bajo el mando de Anna Wintour, directora artística de Condé Nast, editora jefe de Vogue y copresidenta desde 1995 de esta fiesta, que se convirtió en una de las más visibles del mundo entero.

at Daniela Rusak