Cejas ultrafinas: la tendencia de la que se arrepiente Charlize Theron

El regreso de la estética Y2K revivió algunos fantasmas para las que crecieron en los años 2000. El revival de los jeans tiro ultrabajo es una tendencia resistida por las mujeres que ya superaron los 30 y a esta moda se le suma la de las cejas finas. Charlize Theron es una de las mujeres que se arrepienten de haberse subido a ese trend y no quieren volver a ello.

Las cejas finas en forma de línea coparon la escena durante los años noventa y dos mil. Esta tendencia atrapó a adolescentes alrededor del globo y definió los rasgos de estrellas en auge como Gwen Stefani, Angelina Jolie o la propia Theron. 

En los últimos años, famosas modelos y artistas como Bella Hadid, Kendall Jenner y Rosalía se sumaron a esta moda, e incluso algunas de ellas optaron por depilarlas por completo o decolorarlas. 

En una entrevista a InStyle la actriz sudafricana eligió esa decisión como su mayor arrepentimiento en cuestiones estéticas y destacó que sus cejas  todavía están en proceso de recuperación de esa moda. 

Charlize Theron, defensora del envejecimiento natural

La intérprete de 48 años destacó su decisión de abrazar los cambios que atraviesa su cuerpo a través de los años y aseguró que es conciente de que su cara está cambiando y que le encanta que eso suceda.

En un reportaje a Allure, Theron contó que frecuentemente le consultan si los cambios en su rostro se deben a algún tratamiento o retoque estético, pero ella lo niega.  “Me preguntan: ‘¿Qué le hiciste a tu cara?’, y digo: ‘¡Estoy envejeciendo!’ No significa que me hicieran una mala cirugía plástica. Esto es simplemente lo que pasa”, explicó. 

Orgullosa de su aspecto, denunció que existe una doble vara acerca de los efectos del envejecimiento entre los hombres y las mujeres. Aseguró que desprecia la idea de que se considere que "los hombres envejecen como 'un buen vino' y las mujeres no".

Theron es la cara de la fragancia J'Adore de Dior desde 2004 y asegura que tuvo que trabajar en el proceso de aceptar que al ver los anuncios publicitarios con su cara esta presente cambios.