El verano en que me enamoré (The Summer I Turned Pretty), el fenómeno juvenil basado en las novelas de Jenny Han que conquistó a toda una generación, es la serie del momento. Desde que Amazon Prime Video estrenó la tercera temporada el 16 de julio de 2025, cada miércoles se transformó en un acontecimiento digital: los capítulos se convirtieron en tendencia inmediata y los equipos “Conrad” y “Jeremiah” dominaron las redes con memes, encuestas y discusiones apasionadas. Incluso cuentas oficiales de clubes de fútbol europeos como el Barcelona o la Juventus jugaron a tomar partido, amplificando el fenómeno.
La fecha del final que todos esperan
El final ya tiene fecha marcada en rojo en el calendario de los fanáticos: el 17 de septiembre de 2025 se estrena el último episodio, después de un recorrido de lanzamientos semanales que mantuvo la intriga y la conversación viva durante todo el verano. El capítulo 9, lanzado el 3 de septiembre, fue el puntapié para la recta final y desde entonces la expectativa no hace más que crecer.
Los protagonistas que marcan tendencia
El magnetismo de la serie no se limita a la trama. Sus protagonistas se convirtieron en celebridades globales. Lola Tung, la actriz neoyorquina que interpreta a Belly, se consolidó como una de las nuevas it-girls de Hollywood. Gavin Casalegno, que da vida a Jeremiah, alimenta la atención mediática con su vida personal y apariciones públicas que lo acercan aún más a sus fans. Y Christopher Briney, en el papel de Conrad, cautiva tanto por su perfil reservado como por su proyección en cine independiente, lo que refuerza su aura de actor serio y misterioso. La mezcla entre ficción y realidad potencia el vínculo con los seguidores, que sienten que acompañan a los actores tanto dentro como fuera de la pantalla.
Un puente entre generaciones
Aunque la etiqueta de “serie adolescente” parece acotada, el furor va mucho más allá. Las millennials encuentran en El verano en que me enamoré una dosis de nostalgia: la serie les recuerda los veranos en que todo parecía posible, los primeros amores intensos y los vínculos de amistad que marcaban etapas. Para una generación que creció con The O.C., Dawson’s Creek o Gossip Girl, esta historia trae de vuelta esas emociones, pero con un lenguaje más actual, inclusivo y cercano. Por eso no sorprende que muchas madres la sigan junto a sus hijas y la discutan como un puente entre generaciones.
Un fenómeno cultural imparable
Con su mezcla de romance, crecimiento personal y debates virales, The Summer I Turned Pretty ya no es solo una adaptación literaria exitosa: es un fenómeno cultural que marca agenda, crea comunidad y confirma que las historias de verano pueden dejar huella mucho más allá de la adolescencia.
at Cecilia Conde
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