Las esponjas faciales como la conocida Konjac han sido usadas hace décadas en Asia, y gracias a la globalización y auge de la cosmética a nivel mundial han llegado a América para quedarse.
Hay muchas marcas de este elemento que promete múltiples beneficios, desde la exfoliación, limpieza profunda, regeneración e incluso remoción de manchas, sin embargo, como todo producto estético, es importante consultarlo con el dermatólogo, ya que en pieles sensibles puede ser abrasiva.
A la hora de elegir una esponja, más allá de la marca, es importante considerar que la marca use métodos sustentables a la hora de extraer los materiales para elaborarlas, ya que el cuidado de los arrecifes y corales es un compromiso de todos.
Asimismo, tener identificado el tipo de piel es fundamental antes de comprar la esponjita, que dependerá del fototipo la frecuencia del uso de ella. Una de las claves para su uso, es remojarla lo suficiente para que se suavice por completo, de lo contrario, si no está suave puede eliminar una capa más profunda de piel, dejando lesiones o marcas.
ESPONJAS NATURALES BIODEGRADABLES
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