Chanel Crucero 2022/23 en Montecarlo: Guiños a la realeza y homenajes a la memoria de Karl Lagerfeld

Este cinco de mayo y con la privilegiada vista de Mónaco, el Hotel Monte-Carlo fue el escenario perfecto para que se lleve a cabo el desfile Crucero 2022/23 de Chanel. Esta ciudad no fue elegida al azar, para esta oportunidad, la maison eligió esta locación por la especial relación con la familia real y el amor de Karl Lagerfeld por el verano monegasco.

“Para mí, Mónaco es ante todo una cuestión de sentimientos. Esos son Karl, Carolina, Charlotte”, dice Virginie Viard. Además, dejó evidencia a lo largo de la pasarela que la esencia de Karl Lagerfeld aún está viva en cada detalle de Chanel.

“Desde muy temprano, sabía que haríamos un desfile allí, y más en el Beach Hotel. Además, Karl soñaba con eso. Desde este magnífico lugar, se puede vislumbrar su villa, La Vigie. Nunca olvidare los momentos que pasé allí: terrazas y balcones, sombrillas grandes, cestas de flores, tanta belleza", aseguró Virginie Viard.

Los colores icónicos de la firma, como el negro, el blanco y el rosa, son los grandes protagonistas de esta colección en los que encontramos los perfectos aliados para unas soñadas vacaciones con ese toque chic. Además, un punto retro que asociamos de manera natural a Mónaco: shorts, camisetas bordadas con flores, bañadores de estampados gráficos, suéteres blancos.

En ese mismo hilo, Chanel para esta oportunidad y con un tinte más nocturno, propone vestidos drapeados, faldas largas y transparencias. Además, los monos de tweed o de seda forrados con tela ligera fueron una de las prendas que más se destacaron.

También hay que resaltar la presencia de lentejuelas y bordados en forma de flores que adornan vestidos largos de rayas con cuellos altos, un guiño a Karl

El teaser de la colección, dirigido por Sofia y Roman Coppola, pone en escena a un grupo de chicas disfrutando de paseos en barco, baños en el mar o deportes de motor. “Un ambiente deportivo, pero no solo eso”.–

Inspirados en el ballet de Montecarlo y las zapatillas de punta de las bailarinas, los zapatos de satén negro son adornados con finas hebillas de strass, son el complemento perfecto para esa mujer que quiere sentir el ambiente monegasco en cualquier parte del mundo. 

El detalle viral: Un bolso en forma de raquetas de tenis. Sumando, los trajes de baño brillantes se retuercen en faldas negras asimétricas o vestidos drapeados.

La Familia real del Principado de Mónaco, como Charlotte Casiraghi, Estefanía de Mónaco y Carolina de Mónaco, fueron parte de la primera fila, quienes con su mirada crítica hacía el universo de Chanel dieron su voto de confianza a esta nueva colección. “La primera vez que vi a Caroline fue en la playa de Mónaco. Llevaba un vestido negro drapeado, medias muy finas y tacones”, recuerda Virginia Viard.  “Mónaco es inherente a la historia de CHANEL. Hemos vivido tantos momentos felices allí."