Para muchos mostrar la sexualidad femenina, a través de frutas insinuantes es algo grotesco, ofensivo y hasta censurable. La artista estadounidense Stephanie Sarley está desatando el potencial sexual de las frutas y verduras en las redes sociales, y dándole un nuevo significado al concepto ‘food porn’. Con muestras que son demasiado gráficas, la creadora está presentando en el Museo Brot und Kunst de Alemania su obra “Fruta Prohibida”, que explora la sexualidad y el placer femenino.
Sarley viene de una familia de artistas, donde siempre tuvo la libertad y la necesidad de experimentar tanto con la comida como con la sexualidad. La artista multimedia es conocida por su humor surrealista, y en redes sociales cuenta con más de trescientos setenta y tres mil seguidores. A través de sus fotografías y videos, educa a miles de mujeres alrededor del mundo, explicándoles cómo deben masturbarse de manera correcta, utilizando frutas y vegetales con muestras gráficas muy parecidas a nuestros genitales.
“Este jugueteo frutal comenzó de manera espontánea con una naranja que mi novio me había ofrecido. Empecé a juguetear con ella y de repente lo vi claro. Mi mente ahondó en la imaginación, puse mis manos en práctica y la cámara capturó todo” comentó la artista en una entrevista para el Daily Dot.
Un día, mientras Stephanie comía una naranja, descubrió cómo se comportaba la fruta al tocarla con sus dedos. Al apretarla de la forma correcta, entendió que podía sacarle todo el jugo, por lo que le pareció perfecto para explicar cómo debía masturbarse de forma correcta una mujer. El gran componente sexual de sus creaciones requiere de la libertad y la apertura mental. En sus videos utiliza melones, limones, fresas, kiwis, papayas, entre otros.
En sus obras, la artista con formación en bellas artes trata temas relacionados con el sexismo, la censura y el empoderamiento de las mujeres. Incluso realizó grabados, tatuaje, creó el libro de ilustraciones “Dick Dog & Friends Coloring Book” y dos series de retratos “Orcunts y Crotch Monsters”, que sustituyen vulvas por flores y caras.
“No quiero que mis videos sean interpretados simplemente como un ‘cómo masturbar’. Nunca pretendí eso y tampoco es un fetiche mío. Es mi forma de hacer arte. La fruta es un medio genial para mis videos y fotografías, y permite una representación bastante acertada de una vagina. Y con muchas frutas como las naranjas (menstruación), el limón (eyaculación femenina) o la lima y el kiwi (creampie), puedo simular la exploración de la sexualidad femenina” aseguró.
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