Últimamente el ácido hialurónico está tomando protagonismo en el mundo de la belleza, este ingrediente mundialmente conocido aparece en cremas y sérums y además se convirtió en un imprescindible de la medicina estética.
Para resumir las bondades de cada uno podemos decir que el bótox se encarga de paralizar o relajar la musculatura, reduciendo las arrugas de expresión por movimiento, mientras que el ácido hialurónico se encarga de rellenar las arrugas o surcos que se encuentran en el rostro.
¿Qué es el bótox?
El bótox o toxina botulínica es una sustancia que colabora con la prevención y la eliminación de las arrugas faciales sin necesidad de recurrir a una cirugía. Se aplica por microdosis inyectables que ayudan a bloquear las señales nerviosas, paralizando el músculo suave y temporalmente, consiguiendo de esta manera que desaparezcan las líneas de expresión o arrugas no deseadas.
Es un producto que no sólo tiene finalidades estéticas, sino que tiene aplicaciones terapéuticas también, se usa para el tratamiento del estrabismo, migrañas o para bloquear las glándulas sudoríparas de pacientes que transpiran excesivamente, entre otros.
¿Qué es el ácido hialurónico?
El ácido hialurónico es un tipo de azúcar que se encuentra de forma natural en nuestro organismo. Es una sustancia que posee la capacidad de atraer y retener el agua, ayuda a que los tejidos tengan las condiciones adecuadas. Una molécula de ácido hialurónico contiene hasta 1.000 veces su propio peso en agua, y un gramo de ácido hialurónico puede contener hasta seis litros de agua. Esto demuestra su capacidad para mantener hidratada la piel y aportar elasticidad.
Pero cuando vamos creciendo nuestro cuerpo deja poco a poco de generar ácido hialurónico, por lo que si queremos mantenernos con un aspecto joven y saludable tenemos que reponerlo. Se suele inyectar en el entrecejo, patas de gallo, frente, contorno y comisura de los labios, ojeras, pómulos y líneas de expresión a ambos lados de la nariz y la boca.
Diferencias entre el ácido hialurónico y el bótox
-Duración: El bótox dura entre 6 y 9 meses mientras que el ácido hialurónico puede durar 12 meses.
-Actuación: El bótox paraliza la musculatura y evita la aparición de arrugas por movimientos faciales, y el ácido hialurónico rellena arrugas o posibles surcos por heridas o marcas de acné.
-Localización: El bótox suele utilizarse en el tercio superior del rostro y el ácido hialurónico en el inferior por sus resultados y beneficios en ambos casos.
-Restricciones: En mujeres embarazadas no se puede aplicar bótox pero ácido hialurónico si.
ML
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