Cada vez más mujeres, y también hombres, acuden a centros de belleza para hacerse la manicura. Las tendencias demostraron que las uñas son el complemento perfecto para lograr un look canchero, pero es importante destacar que los excesos pueden generar uñas más frágiles y quebradizas. Uno de los métodos que está siendo furor en varios países es el Dip Powder, que promete ser menos dañino que otros tipos de manicura.
A diferencia de la manicura semipermanente como la de gel o las acrílicas, el Dip Powder es una técnica que no requiere el uso de una lámpara led o de luz ultravioleta para el secado y la polimerización del esmalte. La última tendencia en manicura consiste en un polvo fino, hecho de polímero y resina, en el que se debe sumergir la uña hasta lograr el color deseado.
Antes de empezar con el método, es importante preparar las uñas como para cualquier otro tipo de manicura. Primero se limpia, se lima y luego se retiran las cutículas. Una vez que se aplica la base, es momento de adherir el polvo introduciendo el dedo en el Dip Powder del color elegido. Finalmente, expertas recomiendan agregar un esmalte dejándolo secar durante unos 30 segundos.
El furor de esta técnica se debe a que contiene menos toxinas que los acrílicos y geles, permitiendo que el efecto dure hasta cuatro semanas sin mantenimiento.
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