Qué es y cómo hacer un flower bath en casa

El flower bath, o Mandi Bunga en su lengua de origen, se practica en Asia como un ritual para realzar la belleza y limpiar tanto el cuerpo como la mente. Desde este lado del océano, también podemos recrear la experiencia y disfrutar sus beneficios.

Haciendo a un lado las incontables diferencias culturales que encontramos alrededor del mundo, hay un rasgo compartido a lo largo de la historia: el empeño en encontrar formas de prolongar nuestra existencia y mejorar su calidad.

En la alquimia, la búsqueda del elixir de la vida supone la aproximación a la sustancia última de la cual están compuestos todos los seres vivientes: el Anima Mundi.nÉsta, según la creencia, produce que todo esté conectado entre sí.

Muy cercana a estas ideas, para la tradición indonesia, el agua es purificante. Es así que los baños de inmersión se asocian, no sólo a la limpieza del cuerpo, sino también de la mente. Por un lado, porque la acción del agua caliente en nuestro cuerpo proporciona una sensación de bienestar. Por el otro, porque las flores, hojas, hierbas o aceites esenciales añaden propiedades que complementan la experiencia de relajarnos profundamente.

El Mandi Bunga tiene una presencia tan fuerte en Indonesia que se convirtió en un must do para quienes visitan Bali.

Aún sin pensar en su dimensión ritual, podemos aprovecharlo para recibir los beneficios que promete, que van desde la quietud emocional o distensión nerviosa hasta efectos erotizantes.

Éstos son los cinco pasos para recrearlo en casa:

1-Elegir las flores de acuerdo a los colores y aromas que nos gusten.

2- Preparar los pétalos.

3- Añadir aceites esenciales.

4- ¡Disfrutar! Leer, encender una vela aromática, probar una mascarilla nueva, tomar una copa de vino.

 

Viajar es siempre placentero, pero en la estupenda simplicidad de la vida cotidiana, un momento de quietud, también puede agasajarnos y renovar nuestras fuerzas.

at Ariana Santilli