Justicia Espada, sin ser feminista se convirtió en todo un símbolo del poder de la mujer.

Hace 128 años nació en Chile Justicia Espada, la primera mujer Ingeniera Civil de Suramérica. Su padre, a causa de una estafa por confusión de un alias, decidió llamar con nombres y apellidos diferentes, a cada uno de sus 8 hijos. Justicia, se diferenció inclusive con su nombre, del resto de mujeres.

José Acuña, padre de Justicia, se crió en una familia dónde fomentaron la igualdad de género. Él quiso replicar su educación e ideas progresistas, con sus 4 mujeres y 4 varones, a quienes nunca se les trató diferente. Tuvieron la libertad de hacer y estudiar lo que cada uno quiso, sin importar las reglas conservadoras del siglo pasado.

Sansón Radical, Australia Tonel, América del Sur, Arquímides Capitán, Chile Mapocho y Grecia Brasil, fueron los 7 hermanos de Justicia, que al igual que ella, asistieron a la universidad y debido a su educación, nunca se enteraron de las restricciones y limitaciones que tenía la mujer de la época.

Justicia empezó estudiando Pedagogía en Matemáticas, pero decidió cambiarse a Ingeniería civil, fue la única mujer en ambas carreras, pese a que no había restricciones para que fueran a la universidad, simplemente no estaba bien visto que la mujer estudiara. En la Universidad de Chile, ni siquiera había baños femeninos, pero eso no impidió que Justicia continuara con su propósito.

Vivió su vida sin ser activista y sin saber que su legado hoy inspiraría a miles de mujeres. Se recibió en 1919, un años después del fin de la primera Guerra Mundial, 15 años antes de la aprobación del voto femenino en Chile para elecciones municipales y 30 años antes de tener el derecho a votar en las presidenciales.

Justicia al cumplir su mayoría de edad recobró su apellido natural, Acuña. Trabajó en Ferrocarriles del Estado como ingeniera calculista y se destacó ejerciendo jefatura sobre solo hombres. Se casó con un compañero de ingeniería y tuvo 7 hijos, todos varones. Justicia bordaba, tejía, cocinaba y trabajaba. El instituto de Ingenieros de Chile, entrega un premio bianual con su nombre y el Colegio de Ingenieros la tiene en su galería de ilustres. Hoy su legado inspira a Google a rendirle un homenaje con un doodle.