Montañas y moda: el outfit técnico y chic de Juliana Awada

La Patagonia argentina fue el escenario elegido por Juliana Awada para disfrutar de una jornada de trekking y naturaleza, y, como siempre, su estilo no pasó desapercibido. Para la ocasión, optó por un conjunto técnico ideal para el terreno montañoso: pantalones cargo en tonos neutros que garantizan comodidad y movilidad, una camisa amplia en color beige que aporta frescura, y un sombrero de ala ancha para protegerse del sol sin descuidar el look.

Complementó su outfit con una mochila verde olivo, perfecta para llevar lo necesario en largas caminatas, y botas de trekking en tonos tierra, asegurando estabilidad y confort. Los lentes oscuros completaron el look, combinando practicidad con un toque chic.

Este estilo no solo refleja su conexión con la naturaleza, sino también una elección consciente de prendas que equilibran funcionalidad y diseño, mostrando que el buen gusto puede estar presente incluso en las aventuras al aire libre.

El look elegido por Juliana Awada es un ejemplo perfecto de cómo combinar prendas técnicas y funcionales con un estilo cuidado. Los pantalones cargo, confeccionados en materiales resistentes y de secado rápido, son imprescindibles para actividades como el trekking, ya que protegen la piel de ramas o insectos y ofrecen bolsillos prácticos para guardar pequeños objetos. La camisa beige de manga larga, por su parte, no solo aporta un toque elegante, sino que también sirve como barrera contra el sol y permite una ventilación adecuada, algo esencial en caminatas prolongadas.

 

 

A este enfoque funcional se suma el sombrero de ala ancha, un accesorio clave tanto por su utilidad —proteger rostro y cuello de los rayos UV— como por su estética clásica, que le da al conjunto una vibra sofisticada. La paleta de colores neutros, en tonos tierra y verdes, además de mimetizarse con el entorno natural, aporta un aire sobrio y atemporal que nunca pasa de moda. De este modo, el outfit logra un balance perfecto entre lo práctico y lo chic, demostrando que incluso en la montaña se puede mantener el buen gusto.

at redacción Marie Claire