“Con este vestido la rompo”, dijimos todas algunas vez. Y efectivamente es así, porque cuando nos ponemos algo que nos gusta, algo que nos hace sentir atractivas, definitivamente nos mostraremos más seguras frente al mundo.
Puede sonar tonto, pero a más de una le debe pasar. Cuando usamos ropa que percibimos que no nos sienta bien solemos tender a una actitud más introvertida, porque perdemos confianza.
Alguien alguna vez dijo que la ropa es parte de tu personalidad, y un poco de razón en ello hay. Las prendas que usamos no simplemente siguen modas, sino que muchas veces es una manera más de expresarnos. Con un simple conjunto de remera o pantalón podemos transmitir cómo nos sentimos.
“Todo comunica”, dicen los expertos, y no está en mis deseos contradecirlos. Porque es cierto, todo, desde nuestras expresiones no verbales, hasta la camiseta que elegimos ponernos esa mañana, comunica.
Si nos adentramos un poco más en la temática, podemos hasta llegar a la conclusión de que la ropa no solo comunica para el afuera, sino también para el adentro, para nuestra propia persona. Los especialistas en salud mental recomiendan que cada mañana, aunque te quedes en tu casa, te cambies y te saques el pijama. Aunque se trate de una pequeña acción, esto cambia significativamente la forma en la que vas a encarar el día.
Por todo esto, es importante recordar que más allá de las modas y las últimas tendencias, que pueden ayudarnos a armar looks increíbles, también podemos lucir fantásticas con la ropa que nos hace sentir cómodas. Porque si te sentís exitosa con lo que llevás puesto, no queda otra alternativa, lo vas a transmitir.
Accedé a los beneficios para suscriptores
- Contenidos exclusivos
- Sorteos
- Descuentos en publicaciones
- Participación en los eventos organizados por Editorial Perfil.
Comentarios