Yorgos Lanthimos, el cineasta griego, experimentó una notable evolución en su carrera cinematográfica. Desde que fue etiquetado como el nuevo Haneke en 2009 con "Canino", caracterizado por una mirada clínica e implacable hacia la naturaleza humana, hasta su más reciente obra, "Pobres criaturas", que ganó el León de Oro en Venecia y se perfila como una de las favoritas en la temporada de premios.
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En sus primeras películas americanas, como "Langosta" y "El sacrificio de un ciervo sagrado", Lanthimos mantuvo un tono cínico y casi misántropo, aunque la crudeza se fue diluyendo. Con "La favorita", dio un giro hacia la comedia, obteniendo múltiples nominaciones a los premios Oscar. "Pobres criaturas" marca un punto culminante en su carrera, consolidándolo como uno de los cineastas más destacados.
La película es una adaptación de la novela de Alasdair Gray de 1992, con una trama frankensteiniana. Un peculiar doctor (interpretado por Willem Dafoe) utiliza el cuerpo de una joven fallecida (Emma Stone) para implantarle el cerebro de un feto. La historia sigue a la nueva criatura, llamada Bella Baxter, mientras navega por un mundo marcado por su cuerpo adulto y deseado por hombres que buscan controlarla.
La revolución sexual femenina, un tópico de la película
El tema del sexo y sus condicionantes culturales es una obsesión constante para Lanthimos en sus obras anteriores. "Langosta" exploró las relaciones de pareja de manera alegórica, mientras que "La favorita" indagó en la dominación y sumisión. "Pobres criaturas" lleva esta obsesión a nuevos niveles, mostrando la autonomía y libertad sexual de Bella Baxter, desafiando las restricciones sociales y explorando su deseo infinito por descubrir el mundo.
La película destaca por el elevado número de escenas sexuales, que son fundamentales para la trama y su mensaje. Bella Baxter carece de vergüenza o tabúes sobre su cuerpo y placer, siendo una enmienda encarnada a la historia sexual de la humanidad. A través de su personaje, la película aborda temas de liberación sexual en un contexto de estética luminosa del siglo XIX y un peculiar humor entre lo sofisticado y lo salvaje.
Emma Stone, quien ya colaboró con Lanthimos en "La favorita", no solo interpreta a Bella Baxter sino que también se involucró como productora al leer el guion. La película le ofreció un desafío físico al interpretar a un personaje desde un bebé hasta una persona adulta, además de enfrentarse a escenas sexuales que son esenciales para la historia.
La película recibió elogios tanto por la actuación de Stone, quien ganó un Globo de Oro, como por Mark Ruffalo, quien interpreta a un abogado en la trama. La película recuperó su presupuesto solo en EE.UU. y se espera que tenga un exitoso recorrido internacional. Con este filme, Yorgos Lanthimos se consolida como un cineasta innovador con una visión única que desafía las convenciones cinematográficas.
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