Acupuntura: otra alternativa para solucionar el acné

Es infinita la lista de tratamientos que existen para combatir el acné. Sin embargo, puede que aún no hayamos encontrado aquel que nos ofrezca algún tipo de resultado para nuestro organismo. La acupuntura parece ser una nueva alternativa para tratar estos brotes.

No obstante, antes de seguir, es importante que nos detengamos en qué es la acupuntura. La técnica afirma que nuestro exterior (en este caso la piel) es el reflejo de todo lo que ocurre en nuestro interior (léase funcionamiento de nuestros órganos). Por consiguiente, sostiene que un interior sano responderá con una manifestación positiva capaz de ser percibida en nuestro exterior. En resumen, la acupuntura trata aquello que se puede observar, es decir, aquello externo, para llegar a la afección interna que nos produce malestar.

La acupuntura se basa en la creencia de que al pinchar el cuerpo con agujas, el organismo redistribuye los recursos según la necesidad para recuperar el equilibrio interno y en consecuencia también el externo. Entonces, teniendo en cuenta estas ideas básicas pasemos a la preguntas que nos convoca: ¿Cómo la acupuntura soluciona el acné?

Podríamos comenzar por aclarar que, desde la cultura oriental, se considera que el acné aparece por la presencia de calor y humedad en el cuerpo. Según los expertos la humedad corporal casi siempre está relacionada con una disfunción en el bazo o sistema digestivo. Aquí ya se puede ver cómo la salud intestinal afecta directamente a nuestra piel.

Por otra parte, el aumento del calor en nuestro organismo, no solo suele deberse a factores externos propios de la naturaleza, sino que muchas veces estímulos internos, como el estrés o desequilibrios hormonales, también lo fomentan. Es en este apartado donde aparece la acupuntura como una solución alternativa, ya que el método resuelve la humedad y elimina el calor.

Se han realizado ya varios estudios que demuestran los beneficios de la acupuntura para combatir el acné. Sin embargo, no está demás realizar una consulta con un dermatólogo que pueda guiarnos en este proceso y darnos otra mirada sobre el tratamiento y los avances.