Amy Winehouse fue una cantante judío-británica, que con solo 23 años firmó su nombre en la historia del Jazz Contemporáneo con el álbum Back to Black – el rompe corazones que trataba de su relación tóxica con su exmarido, Blake Fielder-Civil, y que le rindió 6 Grammys y la llevó al éxito internacional.
Así como muchas personalidades en la máquina de Hollywood la fama repentina fue demasiado para Amy, sumado a su perturbada relación y abuso de drogas y alcohol. La joven era frecuente objetivo de comentarios de tabloides y la obsesión de los paparazis que siempre la enganchaban en estado crítico. Pero aparte del acoso de los medios, Amy siempre fue vista por sus amigos y familia como una persona generosa, gentil y muy sensible.
Esto fue reflejado en la película “Amy” dirigida por Asif Kapadia, que ganó un Oscar en la categoría Mejor Documental. Hoy, para celebrar su memoria, recordamos 9 momentos fashion en los que Amy nos mostró que moda y personalidad caminan de la mano.
FRED PERRY POR AMY
Uno de los últimos trabajos de Amy fue en conjunto con la marca Fred Perry, firmando la colección de primavera-verano 2011, el año de su fallecimiento. La temporada mostraba una serie de faldas lápiz, estampados vichy y siluetas rockabilly.
VESTIDO DE MATRIMONIO
Romántica incurable, Amy se casó joven y en secreto. Sin embargo, poco después de su muerte, fueron divulgadas fotos de su matrimonio – revelando un vestido pin-up, con estampado de áncoras, hecho a medida.
MODA EN EL ESCENARIO
La cantante siempre tuvo un estilo muy particular, mezclando referencias del rock con siluetas vintage. En los palcos, Amy no tenía miedo de jugar – incluso mezclando prints, y usando ropas de grife con piezas de feria americana.
¡GUANTES LISTOS!
Frecuentemente vista con vestidos sexys y apretados, Amy los estilizaba con guantes, garantizando un look moderadamente atrevido.
SOSTÉN AFUERA
Otro truco de estilismo que nos enseñó la artista es mostrar el sostén afuera del vestido – según ella, le hacía lucir con pechos mayores de lo que tenía, algo que le encantaba.
AMY Y LA ALTA COSTURA
Winehouse siempre tuvo una relación de amor y odio con la alta costura. Por un lado, llegó a quemar en la parrilla vestidos que le mandó Alexander McQueen (no tenían buena reñación); por otro, llegó a ser la musa de Jean Paul Gaultier para una colección entera.
PAÑUELOS Y MÁS PAÑUELOS
Para sostener la increíblemente grande peluca que era su firma personal, Amy coleccionaba pañuelos y bandanas y los lucia con aros dorados tamaño oversize.
EN LA ALFOMBRA ROJA
Mientras muchos artistas buscaban usar looks extravagantes en red carpets, Amy tenía muy en claro lo que quería: mostrar el cuerpo. Escotes apretados y micro faldas eran sus favoritos a la hora de presentarse en un evento.
FORMALIDAD CON ESTILO
En muchas ocasiones, Amy tuvo que presentarse en la corte y resolver uno u otro problema legal. Y eso, no era motivo para ponerse cualquier cosa: los mejores vestidos y tailleur, estilizados con carteras gigantes y cinturones corset.
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