¿Quién no ha escuchado alguna vez de esas reuniones de amigos en las que se intercambian ropa? Pues ahora esta práctica se está volviendo cada vez más popular por lo que han decidido ponerle un nombre: “Swap Parties”.
Se trata de juntarse con amigos o personas que quieran renovar su vestidor de una forma sustentable evitando la contaminación de la industria textil. La cantidad de ropa que circula en el mundo, y hasta en nuestra propia ciudad es infinita, por lo que de seguro debe haber alguien que ya esté harto de una remera y quiera conseguir una nueva.
Algo así como un trueque, el “Swap Party” consiste en que una persona dona una prenda que ya no usa o ya no le gusta, a cambio de obtener otra pieza que alguien más ofreció. De esta forma, y totalmente gratis, cada uno de los asistentes a la reunión podría encontrar una simple solución para reversionar esos conjuntos que tanto adora pero que ya se puso más de cien veces.
Es por todo esto que los “Swap Parties” resultan ser una alternativa excelente para comenzar con el consumo consciente de moda. Intercambiando prendas, y evitando la producción de nuevas vestimentas, estaríamos sumando nuestro granito de arena a la ahora tan en boga y necesaria moda sustentable o circular.
La logística
Estas fiestas de intercambio de prendas pueden darse bien entre amigas o ya en un paso más adelantado, abiertas al público en general. Para el caso es importante establecer un par de pautas para que lo que busca generar un bien no termine convirtiéndose en un caos:
- Establecer un máximo de prendas por participante
- Valorar las piezas según ciertos criterios (por ejemplo, valor, calidad, diseño, telas)
- Solo se aceptan prendas limpias y en buen estado
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