Qué va a estar de moda el año que viene: todo sobre las tendencias del 2021

Desde la agencia mexicana Trendo, en colaboración con "Black Academy" hicieron un reporte con todo lo que tenés que saber acerca de lo que estará de moda en 2021 relacionado a las tendencias de pelo, maquillaje y estilo.

Se podría decir que lo que será "cool" el año que viene se divide en cuatro grandes grupos: el primero influenciado por el glam rock de los 80s, otro por el color y la singularidad; otro por la "austeridad" y por último, el grupo que une el lujo con la sensualidad.

GLAM ROCK

Si la estética es un reflejo del tiempo, esta es la época del clasicismo violento. La sobriedad es una máscara que se quiebra en mil pedazos: el maquillaje se ondula sobre la cara o enmarca el ojo en geometrías angulosas. El peinado es una lucha entre control y desenfreno que crece en volumen sobre la cabeza y parece escaparse en verdes ácidos y blancos desteñidos. Es el regreso del mullet de los 70 y 80, pero nunca demasiado largo; es corto o medio, cómodo y dinámico. Los cortes, andróginos en su esencia, son asimétricos y se pintan de bloques de color. En esta tendencia los peinados son parte del corte, sin arreglos, siempre listo. En 2021 vuelven los flecos que ahora se hacen rectos o en ángulos: queman, punzan y rasgan. Violencia hermosa y contenida; es la rebeldía de lo clásico.





En el mundo de la inmediatez, la practicidad es vital. El maquillaje en este grupo se planteó para ser de vanguardia, sin dejar de ser funcional. Se trata de una reinterpretación del GLAM ROCK DE LOS 80, aterrizado a las necesidades del 2021. La piel es de apariencia ligera, y los labios de tonos neutros con gloss. El punto central del look está en los ojos. Y tiene todo el sentido, considerando que los cubrebocas permanecerán como un elemento imprescindible de nuestro día a día. Los cortes de cabello son elaborados, pero simples de estilizar, porque ya nadie tiene tiempo de pasar horas frente al espejo intentando lograr lo inalcanzable. Dominan los tonos oscuros, desde el castaño al negro, pero con divertidos acentos de color que son fáciles de mantener.

INDIGOS

Los ÍNDIGO son los niños tocados por el gen del futuro les fascina lo tecnológico desde el mundo digital; los e-sports hasta las máscaras virtuales -en las apps de Redes sociales-, hablan de disfraces digitales que tienen como representación los pixeles de color y la necesidad de ser más de lo que somos a través de nuestros avatares. Los que toman el camino de lo digital escogen el disfraz del color y de las tramas de ciencia ficción, en los siguientes años: ahí estará la batalla de la SINGULARIDAD. 

 

AUSTERIDAD & MEDIOAMBIENTE

En el prospecto de un mundo ecológico en crisis los "Climarianos" viven su cotidianidad a consciencia - ellos no hablan de ecología, sino que la viven; estilos de vida simples y lentos que se traducen a una nueva estética para las próximas décadas. Es la estética de los campos de trigo o de lavanda, de los materiales naturales y de la moda minimalista y pragmática. Su maquillaje se mueve entre lo terroso y lo neutro - pieles en maquillajes claros y puros - tocadas por el Sol- y resplandores anaranjados que rodean al ojo para hacerlo brillar. En peinados: las técnicas tradicionales llevadas al 2021 - melenas sueltas con balayage rústico; recogidos de nido de pájaro rematados con un fleco suave y trenzas campiranas, casi bucólicas sujetas sobre la cabeza para dejar respirar el cuello. Esta es la estética de asimilarse y vivir la calma de los ciclos de la naturaleza. Estilo de vida orgánico, pero siempre con estilo

EXCESOS

Más es más y lo quiero todo, es una oda al neo barroco.  El ojo viene delineado, sombreado del sol intenso y bordeados de pestañas larguísimas para que se noten; los pómulos en el contouring más atrevido del siglo XXI; los labios barnizados de labial nude y gloss transparente rematan el rostro en grande para dejar huellas de besos peligrosos. En el cabello, esta vez, el balayage más intenso, raíces oscuras que se aclaran violentamente y se recogen en colas altas para crear aureolas doradas, o se separan a la mitad para enmarcar y disparar. En esta tendencia, la mujer no viste de marca - se desviste y deja marca. Nadie es más sexy y ella lo sabe: no es perra, es perrísima.