Los pantalones de pana de Carolina de Mónaco son el countryside chic que queremos

Enamorarse de un par de pantalones de pana que de inmediato remiten al olor del pasto húmedo y al sonido de las riendas en los establos: eso pasa al ver los pantalones de pana finita que Carolina de Mónaco usó hace apenas unas horas en las caballerizas del Château de Marchais, junto a su hermano el príncipe Alberto, para recibir a una delegación de Bardi y a una potranca bardigiana, Eclisse, destinada al cumpleaños de Jacques y Gabriella.

Ahí, el countryside se convierte en código real, pero con la naturalidad de quien lo lleva en la piel. El eje del look son los pantalones de pana de Carolina: finamente acanalados, de textura suave y en un tono avellana claro, que calienta la piel como una taza de té al volver de una caminata por el campo.

 

 

El jean del otoño se viste de pana

El corte de los pantalones es levemente acampanado: lo justo para alargar la pierna y suavizar el paso sobre la hierba. Este tipo de pana, en color camello, es el corazón de la tendencia otoño-invierno 2025/26: la campiña inglesa traducida a la vida real. No es un disfraz ni una evocación nostálgica, sino un estilo cotidiano con calidad y propósito.
Carolina combina sus pantalones con un saco de lana gris clarísimo, compacto y con textura casi bouclé, cerrado al frente y con bolsillos aplicados de aire utility que evocan establos, garzas en los campos y una Land Rover Defender sobre el camino de grava. Debajo, una camisa celeste papel de azúcar, perfectamente planchada y de cuello marcado, que logra un contraste sutil y elegante con el tono avellana del pantalón.

 

A los pies, botines de cuero marrón, cuyas puntas apenas se asoman entre la pana como terrones secos entre los pastos. Prácticos, algo masculinos, listos para montar, pero igual de perfectos sobre el asfalto.
Cabello carré, raya al costado, reflejos grises y dorados que captan la luz de la tarde, y un make-up casi invisible. Todo transmite la misma idea: hace falta poco para acertar cuando los materiales son nobles y las proporciones dialogan entre sí.

El encanto imbatible de Carolina de Mónaco

¿Por qué funciona tan bien este look? Primero, por la paleta: camello, gris claro, azul suave y marrón cuero. Son los colores de los campos en octubre, inmediatos y reconfortantes. Segundo, por las texturas: pana, lana, cuero. Materias que construyen el estilo incluso antes que el color. Y tercero, por esa línea apenas flared que estiliza sin esfuerzo y se equilibra con el corte recto del saco.
El trend countryside de la temporada se mueve justo ahí: entre la funcionalidad y el encanto. La moda habla de parkas oversize, chalecos acolchados, tweeds y kilts, pero en la vida real bastan tres movimientos a la manera de Carolina de Mónaco:
-adoptar unos pantalones de pana fina en un tono cálido;
-elegir un saco ajustado y cerrado para dar estructura

-sumar accesorios prácticos: cinturón de cuero, botines firmes y una cartera al hombro de líneas limpias.

Si querés actualizar el look, cambiá la camisa por un dolcevita color crema en los días más fríos o una parka tipo Barbour con un pañuelo anudado al cuello cuando llueve. El color camello combina con todo: suéteres tejidos, montgomerys verde musgo o tapados masculinos de corte recto.
Y con un toque urbano —anteojos cuadrados, aros dorados grandes— la pana deja los establos y llega a la ciudad sin perder carácter.

En la foto tomada en Marchais no hay teatralidad, hay práctica de estilo. Carolina de Mónaco conoce ese terreno y domina el equilibrio entre herencia y presente. El resultado: un country chic auténtico, que se mueve, respira y trabaja, recordándonos que la prenda clave de la temporada es un pantalón de pana, color camello y corte apenas acampanado.
Listo para usarse entre establos, tranvías, reuniones o escapadas de fin de semana.
La pregunta final, para cerrar el círculo, es simple: ¿estás lista para rescatar la pana del guardarropa de tus abuelos y darle una vuelta entre las hojas? Carolina de Mónaco ya nos mostró el camino.

 

Este artículo se publicó originalmente en MC Italy.

at redacción Marie Claire