Este viernes se llevó a cabo la misa de Acción de Gracias en la Catedral de St. Paul, para rendir homenaje al largo reinado de la Reina Isabel II con la asistencia de sus familiares. Luego de dos años y medio distanciado, el príncipe Harry aterrizó en suelo británico junto a la actriz y sus hijos para acompañar a su abuela en su Jubileo de Platino.
Aunque los duques de Sussex tomaron gran protagonismo, Kate Middleton no pasó desapercibida. En esta ocasión, la esposa del príncipe Guillermo se presentó en la Catedral de St. Paul con un vestido color limón de manga larga, diseñado por Emilia Wickstead. La duquesa de Cambridge combinó su look con un sombrero con flores a tono, obra de Philip Treacy y unos zapatos de la firma Gianvito Rossi.
Con la idea de rendir homenaje a la monarca británica, Middleton tomó prestados los aros de diamantes y perlas de Baréin, una pieza que fue el regalo de bodas de Isabel II de su padre, el rey Jorge VI.
Por su parte, Meghan Markle asistió a la ceremonia luciendo un abrigo tipo vestido de Dior Alta Costura con marcadas solapas y un cinturón. La actriz acompañó su look con un sombrero de alas anchas y stilettos del mismo color.
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