En los últimos años, el pelo blanco o con canas se convirtió en una tendencia y gracias a esto se produjo un empoderamiento de quienes solían esconderlas con tintura. Este estilo que se da por genética o estética requiere un cuidado especial para lucirlo sano y brillante; y te contamos cómo hacerlo.
Existen distintas formas de lucir el pelo blanco, ya sea en todo el cabello o en mechones blancos sectorizados. Estas opciones marcan diferentes estilos y muchas veces dependen, si no es por elección, de la forma en la que tu pelo pierde la coloración natural.
Más allá del estilo que elijas lucir, sea natural o teñido en peluquería, lo importante es cuidarlo correctamente para que luzca en su mejor versión y mantenga su hidratación y aspecto saludable. Estos consejos pueden ser útiles para lograrlo.
Optá por tu estilo de corte ideal
Para sentirte cómoda con tu pelo blanco o gris, lo mejor es darle una forma y peinado que te permitan lucirlo de la mejor forma. Podés sumarte a los cortes tendencia de la temporada o apelar a un estilo más clásico.
Usá productos específicos para canas
El pelo blanco tiende a virar a tonos amarillentos, como consecuencia de la exposición al sol y otros factores externos del ambiente. Por eso, es recomendable usar productos diseñados para neutralizar esos tonos. Podés elegir shampoos o acondicionares en tono violeta que serán de gran utilidad.
Hidratalo regularmente
Existe una tendencia del cabello canoso a secarse, como consecuencia de la pérdida de la melanina. Y esto sucede mucho más si para llegar al tono recurriste a un proceso de teñido y decoloración.
Buscá productos como acondicionadores hidratantes o aceites como el de argán para reparar el daño y devolverle la hidratación a tu cabello blanco.
Aplicá protección solar
El calor y la radiación UV pueden generar daños en el cabello pero también la piel de tu cuero cabelludo. Para evitarlo, protegete con sombreros, gorras y protector solar para el cabello.
Tené en cuenta que cuanto más claro sea tu pelo, más expuesta va a estar tu piel a los efectos nocivos del sol, así que ponele especial atención a esta protección y mantenimiento a lo largo del día.
Evitá usar calor en exceso
Las altas temperaturas de secadores o planchas para el pelo son factores que pueden dañar a tu cabello blanco. Esto puede generar su debilitamiento y la posterior ruptura de la fibra capilar.
Siempre que sea posible, limitá el uso de estas herramientas de peinado con calor o usalas a temperaturas más bajas. También podés aplicar previamente un protector de calor para reducir los efectos y el daño.
Contá con un especialista en coloración
Si querés lucir un tono uniforme y mantenerlo tan prolijo como desees, podés acudir a un colorista profesional que genere los matices necesarios, gracias a sus conocimientos de colorimetría.
Cuidá adecuadamente tu cabello con canas para destacar su belleza natural y llevarlo con orgullo, aprovechando el cambio social en base al cabello blanco o gris, algo que hace años generaba vergüenza y discriminación.
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