Hotel Termal Dolores: una opción a la hora de tomarse una pausa

El stress de la vida cotidiana invita a realizar una escapada cada vez que se pueda. Muy cerca de la Ciudad de Buenos Aires - a solo 200 km - se encuentra un destino ideal para el descanso. El Hotel Termal Dolores. 

Un baño en aguas termales es ideal para recuperar la tranquilidad. Estos baños mejoran la relajación y la producción de endorfinas. Estimula el metabolismo y el sistema digestivo y ayuda la absorción de minerales a través de la piel. Además, mejoran el dolor muscular, articular, óseo y los problemas reumáticos. 

Las aguas termales de Dolores, son ricas en sales y minerales, de ahí su color y su textura y poseen calcio, magnesio, potasio, sodio y hierro entre otras tantas cualidades. Estimulan la oxigenación del organismo, mejoran la circulación sanguínea y ayudan a eliminar toxinas y gérmenes de nuestro cuerpo.

Pero si bien las aguas termales son su diferencial, las opciones del hotel no se agotan en ellas. De hecho, quien se hospede en el hotel, ya sea para unos días de reposo o incluso para asistir a algún evento dentro del mismo, tendrá a su disposición 3 piscinas termales externas, piscina in-out, sauna, baño turco, jacuzzi, piscina interna termal con hidromasaje, piscina exclusiva para niños hasta 4 años, sala de relax, gimnasio, solárium y 6 salas de masajes.

El hotel posee 76 habitaciones de categoría standard, superior y junior suite con vista al campo y a la laguna. Equipadas con Smart TV con cable, aire frío-calor, frigo bar, escritorio, detectores de humo, línea telefónica, cofre de seguridad y conectividad wi-fi en áreas comunes.

En el exterior, las 3 piscinas termales, forman un espejo de agua de más de 500 m2, enmarcadas por la laguna del Parque Termal. El lobby, con una altura de más de 8 metros, nos recibe con una colección permanente de arte, y livings que nos invitan a la lectura, con una propuesta variada de libros a disposición de nuestros huéspedes.

Nuestro Restaurante “1817”, con una capacidad de 200 cubiertos, abierto al público durante todo el día, cuenta con una exquisita oferta gastronómica, y en el Restaurante “Alma Sana”, los huéspedes podrán disfrutar de un ambiente descontracturado.

Si las aguas termales, los restaurantes, y los dormitorios no son suficiente, el abanico de posibilidades se completa con canchas de tenis, de pádel, de fútbol, de vóley, bicicletas de paseo, y una variada propuesta recreativa para niños, con juegos en el exterior y en el interior. El Hotel Termal Dolores es un lugar ideal para descansar, recargar energías, reconectarse con el placer y, por qué no, divertirse.