Al momento de preparar tus uñas, ya no hay tiempo para pensar en posibles rupturas, extracciones, fragilidad y quiebre de uñas naturales. La última tendencia en manicura trae una solución: Soft Gel, las extensiones de uñas de gel. A diferencia de las uñas acrílicas, estas son más fáciles de aplicar y de quitar, además de una alternativa más saludable.
El material de las Soft Gel hace que sean más duraderas, no requieren productos químicos agresivos y no dañan las uñas naturales. A la hora de quitarlas, solo necesitamos remojarlas en acetona, ya que las puntas del gel se disuelven.
“Tienen la misma flexibilidad, liviandad y grosos que una uña natural. La aplicación es más rápida, pero con la misma durabilidad, permitiendo que la uña natural crezca de manera óptima” aseguró la experta en manicura Marta & Pastel.
Las extensiones de uñas de gel pueden durar hasta tres o cuatro semanas y se recomienda dejar que las uñas naturales reciban oxígeno, que respiren una semana por lo menos, entre cada aplicación de extensión.
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