El vaivén de la moda es una constante: lo que fue furor hace una década puede renacer con nueva fuerza (y estilo). Mientras el Y2K dominó los últimos años con su maximalismo dosmilero, ahora es el turno de los 90, que regresan en clave sofisticada para la temporada de alto invierno.
Esta especie de “cápsula del tiempo fashionista” recupera siluetas, texturas y estilos con materiales y cortes actualizados. Te mostramos las piezas claves que vuelven recargadas y listas para desafiar la estética vigente.
Sastrería estructurada: poder, pero relajado
Ícono de los 90, el conjunto sastrero vuelve con fuerza. Ya no reservado al mundo corporativo, el traje se adapta a la vida urbana: blazers oversize, pantalones amplios y texturas inesperadas se imponen en versiones más descontracturadas. En pasarelas como Saint Laurent, la silueta clásica se fusiona con cuero, seda y un espíritu más libre.
Guillerminas modernas: del coquette al avant-garde
Delicadas pero potentes, las guillerminas reviven con el boom de la estética coquette y la fiebre parisina. En esta nueva era, Maison Margiela las transforma con diseño tabi, separando el dedo gordo para mayor estabilidad. Un guiño a la tradición japonesa y una muestra de cómo lo clásico se reinventa con audacia.
Camperas de cuero: un básico que nunca falla
Blazers, chalecos y camperas de cuero fueron un must de los 90. Esta temporada regresan con siluetas oversize, hombros relajados y cintura marcada. Atemporales, versátiles y con actitud, se posicionan como el comodín perfecto para cualquier look de invierno.
Botas de caño ultra largo: sensualidad y rock
Símbolo de poder y feminidad, las botas XXL —por encima de la rodilla— se consolidan con un estilo más baggy y detalles como tachas metálicas. Fueron reversionadas en 2016 por Ariana Grande y ahora regresan con fuerza, listas para acompañar los looks más audaces de la temporada.
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