Del 6 de julio del 2022 hasta el 22 de enero 2023 el Museo de Artes Decorativas de París le dedica una exposición a la creadora Elsa Schiaparelli bajo el título Los mundos surrelistas y con una puesta en escena poética y sorprendente confiada a la conocida arquitecta de interiores Nathalie Chinière.
El visitante no sólo puede apreciar las destacadas y maravillosas prendas de su trabajo como estilista sino también sorprenderse tomando conocimiento de una época rica en creaciones debido al trabajo en conjunto con artistas tales como Salvador Dalí, Horst, Cecil Beaton, Man Ray, Leonor Finí y tantos otros de su generación. La exposición pone en evidencia este trabajo en conjunto con los grandes de su época que dio vida a una obra audaz y comprometida en un periodo que va de 1920 al 1930.
El museo ya hizo otra exposición en 2004 sobre la carrera de Elsa Schiaparelli, pero esta vez quiso hacer conocer al público la fantasía innovadora, su amor por el espectáculo, su delicadeza y buen gusto vanguardista que dio mucho que hablar por aquellos años de esta extravagante italiana que conquistó París.
La exposición reúne 520 obras de la creadora donde podemos apreciar 272 prendas y accesorios de moda; en los salones encontramos, pinturas, esculturas, bijoux, frascos de perfumes, cerámicas, afiches y fotos, muchas de ellas firmadas por los mas grandes nombres de la época. También, se pueden apreciar prendas de firmas como Yves Saint Laurent, John Galliano, Christian Lacroix o Alaïa, que fueron hechas inspirándose en la estilista italiana. Recordemos también que Daniel Roseberry, director artístico de la firma desde 2019, interpreta la herencia de la artista con un gran suceso mundial.
¿Quién fue Elsa Schiaparelli?
Educada en un medio intelectual, Elsa no podía dejar de lado su fascinación por el arte y su admiración por los grandes de su tiempo. Una manera, según ella, de divertirse creando y no aburriéndose a hacer simplemente vestidos para sus clientas. Todas sus prendas de la época son un reflejo de ese arte: trajes de noche, accesorios, ropa de sport, perfumes, conjuntos o vestidos.
Todo lo que ella pudo realizar con humor y divirtiéndose en compañía de sus talentosos amigos forma parte de su exploración artística. La exposición pone en evidencia año a año todas las obras destacadas de la italiana con los momentos más importantes de su trabajo.
La primera parte de la muestra está dedicada a los dibujos de sus colecciones que fueron religiosamente conservados y donde podemos apreciar su despertar creativo y su admiración por el estilista Paul Poiret, su mentor, a quien conoció en 1922 y que le hizo descubrir su vocación de modista. Elsa Schiaparelli comienza confeccionando suéteres con motivos trompe-l'œil (que "engañan al ojo"), le siguen muchos modelos de inspiración y estética surrealista trabajando con materiales aun no vistos para la época como el plástico transparente.
En la exposición hay muchas fotos que son testigo de la complicidad que tuvo con Man Ray además de haber sido también su modelo en muchas ocasiones. En una sala se hace referencia a una temática que Schiaparelli privilegiaba: la antigüedad italiana, otra reconstruye el salón principal de la casa Schiaparelli situada desde 1935 en el 21 de la Place Vendôme en París y otra sala domina todo su saber hacer en materia de fragancias destacando su famoso Shocking, perfume que fue un suceso mundial en su momento.
Los bordados famosos los realizó siempre en colaboración con la reconocida casa Lesage de París donde hoy en día todavía la marca participa a las colecciones de los reconocidos estilistas parisinos y extranjeros. Entre 1938-1939 la comedia del arte es su tema favorito, mezclando el barroco de inspiración Versalles. El circo es otro tema tratado, caballos, elefantes y acróbatas aparecen en sus diseños.
Se termina esta muestra con las siluetas contemporáneas realizadas por Roseberry quien pone en relieve la sensibilidad creativa y sub realista de la fundadora tal como se anuncia en el título de la expo.
Para Elsa Schiaparelli en los 20 años su arma favorita fue su trabajo vanguardista, un juego que le permitió re inventar tanto a la mujer como a la femineidad, a la apariencia como al espíritu.
Schiaparelli cerró su atelier en 1954 y se dedicó a escribir su autobiografía Shocking life. Murió en 1973 pero su obra permanece bien vigente en la actualidad, donde se ve y se siente un París, divertido, vibrante, curioso de cada novedad. Una mujer que legó una herencia rica y próspera para todos los grandes estilistas franceses y extranjeros, una mujer de ayer que sigue estando presente en la moda de hoy.
at Lilian Rinar (desde París).
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