Las mejores fotos del desfile de Javier Saiach basado en un cuento de hadas

El diseñador Javier Saiach presentó su colección de alta costura “De Hadas y dragones” con un espectacular desfile en la mansión del Four Seasons. 

Esta colección, con diseños realizados íntegramente a mano está inspirada en un cuento que escribió Saiach. 

“Hadas de la tierra encabezan la marcha, los tonos naranjas de sus atuendos nos develan la cercanía del otoño, de la necesidad de dejar que las cosas mueran para que puedan renacer más bellas. Y como una profecía auto cumplida, detrás de ellas vuelan las aves fénix. Abrazadas por el verde de las hojas y con la asombrosa presencia que sólo un ser inmortal sabe portar, ellas custodian algo más grande, algo que cuidan con cada fibra de su ser”, relata el diseñador en una parte de su cuento.

Así fue como la pasarela de Javier Saiach se convirtió en un escenario de ensueño, mágico, donde las modelos desfilaban como si fueran personajes de este cuento, en diferentes bloques de colores y temas. 

En un momento aparecieron las hadas de la tierra, con unas flores enormes en naranjas y amarillos. Las hojas se vuelven empolvadas y la base del tul, de un color sepia suave toma el color del otoño.

Luego fue el turno de las aves del paraíso, con modelos llevando diseños en colores verdes pistacho, celeste, verde musgo, pailletes bordados y tules.

En un momento del cuento soñado por Javier Saiach hace referencia al dragón plateado, como “una fuerza imparable que avanza con fuerza y elegancia, reclama su lugar con un rugido poderoso, demostrando que no es necesaria una corona para que se reconozca la verdadera fortaleza”.

Entonces en la pasarela llegó el momento de los templarios en plata, diseños en pailletes grandes de distintos tamaños, peltre, tules, tafetanes y pedrería. Después el Dragón y su clan representado por vestidos en color offwhite con rosa, cristales, plumas, terciopelo, organza, volados y bordados en pedrería e hilo.

En la primera fila del desfile de alta costura estuvieron María Belén Ludueña, la primera dama porteña, Moria Casán, una de las musas de Javier Saiach, María Vázquez y Analía Maiorana.