Flor Baragiani: la estilista de las personalidades argentinas más destacadas

Referente indiscutida de la moda contemporánea, Flor Baragiani se consolidó como una de las estilistas más elegidas por celebridades nacionales e internacionales. Su mirada sofisticada, su sensibilidad estética y su capacidad para interpretar a cada mujer la llevaron a trabajar en alfombras rojas, producciones editoriales y eventos de alto perfil.

Más que vestir, Flor construye identidad. Su trabajo se basa en entender a la persona, su energía y su momento, para potenciar desde la autenticidad. Elegancia, feminidad y equilibrio definen su sello: un lujo silencioso que no necesita excesos para impactar.

Además de acompañar a figuras públicas, su compromiso con la imagen real la llevó a desarrollar asesorías personalizadas donde moda y belleza dialogan de forma integral. Para Flor, la imagen es un lenguaje completo: vestuario, maquillaje, pelo y actitud funcionan como una unidad.

Flor Baragiani es elegida para asesorías de estilismo al exterior por su mirada internacional, su experiencia en producciones de alto nivel y su acompañamiento personalizado en cada destino, asegurando una imagen impecable y alineada a cada contexto.

Su trabajo la llevó a ser contratada para producciones de marcas internacionales de primer nivel como Armani Beauty, Polo Ralph Lauren y otros renombres del universo fashion & beauty, además de colaborar con personalidades destacadas y proyectos editoriales de alto perfil.

—Sos una de las estilistas más elegidas por celebridades nacionales e internacionales. ¿Qué creés que marca la diferencia en tu trabajo?

-Creo que la diferencia está en la escucha. No trabajo desde la imposición, sino desde la interpretación. Cada mujer tiene una historia y mi rol es traducirla en imagen.

—Tu nombre está asociado a eventos de alto perfil y producciones editoriales. ¿Cómo vivís esa responsabilidad?

-Con mucho compromiso. La imagen comunica todo el tiempo y, cuando se trata de figuras públicas, cada detalle importa. Me gusta que cada look tenga sentido y coherencia.

—¿Cómo definirías tu estética personal?

-Elegancia contemporánea. Me atrae el lujo silencioso, las líneas limpias y la sofisticación sin exceso. Menos ruido, más identidad.

—¿Qué lugar ocupa la belleza dentro de tu concepto de imagen?

Un lugar central. La imagen es un todo: moda, maquillaje, pelo y actitud. Cuando todo está en equilibrio, la mujer se siente segura, y eso se nota.

—Trabajás tanto con celebridades como con mujeres reales. ¿Qué encontrás en común entre ellas?

-La búsqueda de seguridad. Todas, sin importar su exposición, quieren verse bien y sentirse auténticas. Mi trabajo es acompañar ese proceso.

—¿Qué tendencias ves venir con fuerza para las próximas temporadas?

-Una vuelta a lo natural, a los tonos neutros y pasteles suaves, a la elegancia relajada. Europa está marcando un camino más consciente y refinado.

—¿Qué importancia le das al asesoramiento personalizado?

-Es clave. No creo en fórmulas universales. Cada mujer necesita una guía adaptada a su estilo de vida, su cuerpo y su personalidad.

—¿Qué consejo le darías a una mujer que quiere potenciar su imagen?

-Que se conozca y se anime a simplificar. El verdadero estilo aparece cuando dejamos de copiar y empezamos a elegir con criterio.

—Después de tantos años en la industria, ¿qué te sigue motivando?

-Crear, evolucionar y acompañar. La moda cambia, pero la esencia permanece, y eso es lo que más me inspira.

-Trabajás en un mundo muy expuesto y rodeada de muchas personas. ¿Cómo hacés para cuidar tu espacio personal y encontrar equilibrio entre tu trabajo y tu vida privada?

-Lo separo muy bien. Siempre fui igual con todos, desde una figura muy reconocida hasta una amiga. Nunca sentí la necesidad de ponerme en un lugar distinto ni de creerme algo que no soy. Trabajo con personas, no con personajes, y eso me ayuda a mantener los pies en la tierra. Creo que cuando una se mantiene auténtica y simple, el equilibrio aparece solo.