Decí adiós a los dedos resecos durante la ola polar, con estos tips de expertos

La piel reseca alrededor de la uña, además de molesta es muy frecuente durante los climas extremos como la ola polar que atraviesa la Argentina.  Esas pequeñas pieles más allá de lo estético pueden volverse dolorosos y propensos a infecciones si no se tratan correctamente. Por suerte, con una rutina constante y algunos hábitos clave, es posible reducir su aparición y mantener unas manos impecables.

Hidratación constante: la clave silenciosa del bienestar cutáneo
La piel seca es terreno fértil para los cueritos. Usar una crema humectante rica en ingredientes emolientes como glicerina, manteca de karité o ceramidas, varias veces al día, es fundamental. Los aceites naturales como el de jojoba o almendra, también pueden aplicarse en las cutículas para aportar flexibilidad.

Mejor cuidar y recortar
Si aparece un cuerito, jamás se debe arrancar. Eso solo abre la puerta al dolor y a posibles infecciones. Lo ideal es suavizar la zona con agua tibia, empujar suavemente las cutículas con un palito de naranjo y cortar el exceso con una tijera bien afilada y desinfectada.

Evitar agresores silenciosos
Los productos de limpieza, el agua muy caliente y los cambios bruscos de temperatura pueden resecar la piel sin que lo notemos. Usar guantes al limpiar, secar bien las manos después de lavarlas y optar por jabones suaves sin sulfatos ayuda a proteger la barrera cutánea.

Rutina nocturna: el momento estrella
Antes de dormir, es el momento perfecto para aplicar una capa generosa de crema y envolver las manos en guantes de algodón. Este truco clásico permite que los activos penetren profundamente durante la noche.

Nutrición desde adentro
Una alimentación rica en ácidos grasos esenciales, vitamina E y biotina no solo mejora la piel, también fortalece las uñas. Incorporar frutos secos, palta, pescado y vegetales de hoja verde puede marcar una diferencia notable.

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