Si querés empezar a incorporar componentes naturales a tus rutinas de ciudado del pelo, algunos de los más efectivos son:
- Mango
Posee acción nutriente y poder hidratante aportado por el polisacárido catiónico que retiene el agua a nivel de la fibra capilar. El pelo se vuelve más elástico y resistente.
- Keratina
Ayuda a fortalecer las zonas debilitadas de la estructura capilar. Suaviza y acondiciona. Es ideal para cabellos aclarados.
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- Argán
Protege y repara el pelo seco y dañado que ha sido sometido a agresiones químicas, restaurando la fibra capilar.
- Aloe Vera
Recomendado para uso frecuente, humecta en profundidad el cabello normal dejándolo brilloso y saludable.
- Almendra y pistachio
Brindan fuerza y vitalidad, aportan magnesio, proteínas y vitaminas K, B1 y B, que mejoran el flujo sanguíneo, lo que se traduce volumen y fuerza.
- Caléndula y Manzanilla
Combinación ideal para cabellos normales, secos o dañados. Suavizan y dan brillo resaltando el color. Son revitalizantes y tonificantes naturales, ayudan a combatir la descamación de la epidermis.
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- Romero y Tea Tree
Dúo que actúa en cabellos grasos o dañados. Astringente y reparador, revitalizante y antiséptico. Estimula la circulación y da brillo. Fortalece la raiz y ayuda a remover la piel descamada.
- Yuca y bayas de goji
Mix perfecto para restaurar el brillo del cabello dañado o sensibilizando, aportando sensación de vitalidad.
Algunos de los componentes que generan dudas y que es mejor evitar, o al menos prestarles especial atención, son:
- Sulfatos
Agentes responsables de crear la espuma y eliminar la suciedad del cabello, su acción de limpieza puede llegar a arrastrar, también, la barrera hidrolipídica del cuero cabelludo, dejándolo seco, quebradizo, sin brillo ni protección. Además, tardan mucho en degradarse y contaminan.
- Siliconas
Son ingredientes sintéticos cuyo uso prolongado puede provocar oclusión de la piel o el pelo generando reacciones acneiformes o deshidratación. No son biodegradables y causan un fuerte impacto negativo.
- PEGs
Grupo de compuestos variados, derivados del petróleo, que se utilizan como surfactantes, emolientes y emulsionantes que aumentan la capacidad de formación de espuma y dan sensación de limpieza y suavidad. Modifican el manto hidrolipídico de la piel dejándola desprotegida y aumentando su permeabilidad a cualquier agente externo nocivo.
Pueden causar irritación o sensibilización. Además, tardan mucho en degradarse.
- Parabenos
Son los más polémicos. Se trata de sustancias de síntesis químicas derivadas del petróleo utilizadas como conservantes que pueden ser nocivos para la salud.
Tienen alto poder bactericida y fungistático, prolongando la vida útil del producto. Algunas fuentes aseguran que al ser absorbidos por la piel pueden tener un efecto estrogénico y hasta generar cáncer.
Sin embargo, la Dra. Cristina Pascutto, dermatóloga y asesora médica de Pierre Fabre, explica que ese punto “fue desmentido por la Asociación Americana del Cáncer (ACS) como también por el panel de expertos de revisión de ingredientes de cosméticos.
A pesar de ello, cada vez existen más productos sin parabenos”, confirma. Para identificarlos, hay que buscar sus siglas en inglés: tifmethylparaben, propylparaben, butylparaben, benzylparaben.
Sin llegar al extremo de poner en práctica el no-poo –según aclara Pascutto no existen estudios que avalen su efectividad-, hacer un uso más consciente de los productos para el cuidado del pelo sí es una buena opción.
Elegir los que se adapten a nuestras necesidades, leer las etiquetas, prestar atención a las fechas de vencimiento y escoger marcas reconocidas y aprobadas por las autoridades sanitarias son algunos consejos para subirnos a la ola del gran cambio.
at Carina Etchegaray
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