No hay que ser una experto perfumista, ni gastar un presupuesto muy elevado para tener aromas variados listos para cualquier evento; solo basta con tener en claro ciertas reglas para hacer un buen layering de perfumes que creen fragancias más complejas y duraderas. Esta técnica de perfumar mediante capas de distintos productos es la opción ideal para dejar una marca distintiva en todo lugar que frecuentes.
El layering es la mezcla de fragancias hasta alcanzar una combinación ultra personalizada y hecha a medida. La práctica es similar a la técnica de skincare creada en Japón y Corea, que supone la superposición de gel, serums y cremas para potencias el efecto de sus activos. Pero a diferencia de esta técnica que propone aplicar de lo más liviano a lo más denso, en en el caso de los aromas se recomienda hacerlo a la inversa. Por eso, primero es recomendable colocar una crema como base, después pasar a los aceites naturales y por último la fragancia a base de alcohol.
El layering de fragancias comienza entonces con la aplicación de crema corporal, talco aromatizado, gel de ducha o desodorante; todo esto coronado por uno o dos perfumes que ayuden a potenciar y fijar los aromas. Estas ‘capas’ se pueden aplicar desde que salís del baño, y es lo que se recomienda, ya que con la piel seca es muy dificil lograr un aroma duradero.
Algo importante a tener en cuenta si el layering va a ser con perfumes, es que no se recomienda usar más de dos fragancias. Y es fundamental que ambas fragancias tengan alguna nota de su aroma en común, ya sean frutales, cítricas o amaderadas. El orden de aplicación es importante, ya que se sugiere colocar los aromas más fuertes primero y después las más tenues. No es conveniente pulverizar dos aromas potentes, ya que pueden competir y no lograr el efecto deseado.
Combinaciones infalibles para un layering perfecto
Siempre hay que saber de antemano las notas que posee el perfume o producto a utilizar, para lograr una combinación exitosa.
Las fragancias con notas de ámbar, madera o almizcle combinan muy bien con algo más fresco como puede ser un perfume frutal o cítrico.
Si te interesa hacer una combinación cítrica potente, una fusión entre bergamota y pomelo puede ser interesante. También se puede agregar algun aceite de lima o limón para dar un toque más llamativo.
La fusión entre rosa y jazmín es una buena opción si lo que se busca es darle un toque romántico. Y al sumarle aceite de naranjo o lavanda, se puede obtener un layering más que interesante.
Si tu estilo es más oriental, una buena idea es aplicar alguna fragancia con notas de ambar y otra de vainilla. Estas dos fragancias se conjugan muy bien con la canela y el cardamomo.
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