Nina Ricci se anima a una nueva era de frescura tras el lanzamiento en París de la fragancia Nina Le Parfum, la evolución intensa de su icónica fragancia Nina by Nina Ricci. El lanzamiento llega de la mano de su nuevo director creativo, Harris Reed. Un centennial recién egresado de la escuela de Moda de Central Saint Martins, que tuvo como primer cliente a Harry Styles y que a los 26 años se ha convertido en el Director Creativo más joven de la historia.
Una cita única
El lanzamiento de esta nueva fragancia fue en el barrio que atesora las historias de los artistas mas románticos de París: Monmartre. Un pasillo de adoquines zigzagueante envolvía a los invitados en un halo de espíritu bien parisino, al llegar a la cima, espejos que nacían desde el piso y se perdían entre la copa de los arboles sostenían en el aire al nuevo frasco de Nina Le Parfum. Sí, las botellas de vidrio rojo reciclado con forma da manzana se sostenían suspendidas y desplegaban la magia del aroma del Eau de Parfum, que combina el triple extracto de manzana con la frescura del limón.
Siguiendo el camino, la Triple F de Nina Ricci: femenina, fluida y francesa daba la bienvenida. Ahí estaba Harris con un look tan atrevido como moderno que no permitía dudar cuál será el nuevo estilo de la casa francesa. Con su mera presencia, el mensaje es muy claro: ¡Genderless! (moda sin género). Su traje de microtul trasparente, el nail art y su pelo colorado largo hasta las caderas irradiaban la audacia de un creador que expresa su activismo a través de sus diseños.
Estilo francés
Cuando una maison le abre sus puertas a un nuevo director creativo, inicia el desafío de crear un nuevo capitulo en su historia. Pero lo que puntualmente diferencia a las casas francesas de las demás, como es el caso de Nina Ricci fundada en 1932, es que los años convierten su pasado en una herencia digna de ser cultivada. Herencia que a su vez, hecha raíces, y se convierte en un legado.
El punto es, que para que ese legado trascienda, año tras año las marcas deben evolucionar en sus creaciones a la par de la sociedad, y en simultáneo, trabajar en pos de alcanzar la nota más pura de su identidad. Es por esto mismo que Harris Reed, y su musa, la estrella Kiernan Shipka (protagonista de Sabrina, Netflix), se atreven a seguir la intuición de su generación jugando con la metáfora de la manzana como fruto prohibido en la campaña de lanzamiento de Nina Le Parfum.
La fragancia concentra la esencia de la modernidad y la frescura del movimiento, mientras que alza la voz de una nueva generación que proclama la fluidez de los géneros a través de una femineidad que casualmente disrumpe en el marco de la semana de la moda masculina de Paris.
La llegada de Harris y la dupla mágica con Kiernan empoderan la esencia de una nueva era, no solo para Nina Ricci, sino para el mundo.
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