Cupo trans laboral. (Pexels)
Acceso de personas trans y no binarias al mundo laboral: desigualdad en los procesos de selección de personal
A pesar de las políticas de género de vanguardia en Argentina, el mercado laboral sigue siendo complejo para las personas trans y no binarias.
Muchos son los avances que en los últimos años se han dado en relación a la agenda de las personas trans y no binarias, y de la comunidad LGBTIQ+ en general. En lo que respecta a leyes o normativas, nuestro país fue pionero en muchas, y contamos con la Ley de Identidad de Género, el DNI no binario, el cupo laboral travesti trans.
Esto, que garantiza un piso de inclusión y trato digno, sigue sin ser suficiente y plantea más desafíos: el ámbito laboral sigue presentando grandes barreras para el ingreso y permanencia de las personas travestis, trans y no binarias. Desde Grow- género y trabajo analizamos esta situación, y proponemos algunas iniciativas para comenzar a transformarla.
Una realidad de exclusión
Los datos son elocuentes: según el Relevamiento Nacional sobre las condiciones de vida de la diversidad sexual y de género en Argentina, realizado en 2023, 4 de cada 10 mujeres trans o travestis respondieron haber sido despedidas o rechazadas de su trabajo debido a su identidad de género; mientras que el 33% de los varones trans y un 25% de las personas no binarias dijeron haber recibido agresiones o discriminación en el ámbito laboral.
Por esto, creemos en el rol que pueden tener las organizaciones empleadoras para llevar adelante iniciativas que promuevan una verdadera inclusión.
El Programa “¿Quién puso ese armario en mi oficina?”, trabajamos junto a las organizaciones que buscan llevar adelante procesos de transformación. Se trata de un programa integral, que incluye una diversidad de propuestas como la asistencia para el diseño de protocolos para la transición y la afirmación de género, o licencias de cuidado pensando en la diversidad de familias; talleres de formación y reflexión, para hacer parte de esta agenda a todo el personal de la organización; o la asistencia en la implementación de procesos de selección transparentes y libres de sesgos.
Es mucho lo que las organizaciones empleadoras pueden realizar, para generar un cambio y promover una verdadera inclusión en los espacios de trabajo.