8M2021 Las mujeres perdieron 20 años de equidad de género en la pandemia

En el marco del Día Internacional de la Mujer, el Foro Económico Mundial (WEF) publicó recientemente su último informe elaborado por la consultora Delima Marsh, sobre el impacto de la pandemia en la inequidad de género, el cual arrojó que la participación laboral de la mujer cayó notablemente.

La participación femenina representaba el 40% en América Latina, y por la crisis de la pandemia, dicha participación cayó 10 puntos. La mujer ha tenido un gran desafío en el mercado laboral, y la crisis del coronavirus retrasó dos décadas de avances en cuanto a la participación de género.

La ONU, había mostrado dentro de sus cifras que, durante la pandemia, las mujeres latinoamericanas trabajaron en promedio 4 horas al día en labores domesticas no remuneradas, versus 1.7 horas de los hombres, lo cual llevó a que muchas mujeres se vieran obligadas a dejar sus trabajos y dedicarse a las labores del hogar.

La alerta emitida por la organización es debido al impacto que se podrá generar a largo plazo, en el cual las mujeres, jóvenes y poblaciones minoritarias, podrían verse afectadas, por el peso y sobrecarga que el confinamiento trae consigo.

Marsh propone que las compañías deben incorporar y fortalecer beneficios para la igualdad de género que ayuden a romper estigmas y se construya una cultura de diversidad. Trabajando en aspectos como el trabajo flexible, programas de lactancia y retorno laboral, licencia complementaria, apoyo en cuidado a la salud mental y salud sexual. Beneficios en fertilización in vitro, acceso a nuevas tecnologías como test genéticos y soporte en enfermedades crónicas y menopausia.

La mujer durante la pandemia no solo tuvo una sobrecarga de labores no remunerados, sino que al menos el 35% de las mujeres heterosexuales han experimentado violencia física y sexual durante la pandemia, las lesbianas en un 44% y las bisexuales en un 61%.

También en el informe se demostró que factores personales durante la pandemia, como el acoso, la discriminación y el estrés prologado, hace que las mujeres presentan 2.5 veces mayor probabilidad de sufrir problemas ligados a la salud mental que los hombres.