Continuando con la tendencia de reclutar altos ejecutivos dentro del grupo, a comienzos de esta semana Kering hizo dos importantes anuncios: Emmanuel Gintzburger, el director ejecutivo de Alexander McQueen pasará a desempeñar las mismas funciones en Versace a partir del 12 de septiembre; mientras que Gianfilippo Testa, el ejecutivo de Gucci, se convertirá en el director general de Alexander McQueen a partir de mayo.
Gintzburger cuenta con casi 25 años de experiencia en el sector de lujo, industria en la que comenzó en 1998 en Louis Vuitton. Cuatro años más tarde, se transfirió a Sephora, donde se encargó del comercio minorista regional, antes de asumir el cargo de director de marketing. En 2007 dejó LVHM por Lanvin, como director minorista internacional, y luego se incorporó a Kering en 2009. En 2016 asumió la dirección de Alexander McQueen, en donde estuvo a cargo de acelerar la expansión, transformando la marca en una casa de lujo por derecho propio con una facturación de más de 500 millones de euros.
“Estoy encantada de que Emmanuel se haya unido a la familia Versace, tiene una increíble experiencia en lujo. Tan pronto como lo conocí, supe que era el socio perfecto para ayudarnos a llevar a Versace a alturas aún mayores” aseguró Donatella Versace.
Gianfilippo Testa comenzó su carrera en el año 2002 en LVMH, iniciando en Tag Hauer y dos años más tarde siguió en Fendi. En 2016 se trasladó a Kering, como presidente de China en Gucci, antes de convertirse en presidente de EMEA y vicepresidente global de venta al por menor en 2019. Ahora, Testa tiene la tarea de continuar en Alexander McQueen con el crecimiento que tuvo en los últimos años, preservando la identidad creativa y artesanal de la casa.
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