Madre e hija unidas en un proyecto que combina arte y cristales 

Los cristales se convirtieron en una tendencia que está obsesionando a las celebridades y toda la comunidad en las redes sociales. Basta con ver a Lali Espósito luciendo sus botas cristalizadas en “Disciplina Tour”, a Emilia Mernes luciendo cristales debajo de sus ojos y en su micrófono, o a Natalia Oreiro conduciendo “¿Quién es la máscara?” con su tablet cristalizada. Pero cuando Silvana y su hija Sofía comenzaron con este emprendimiento hace casi una década, jamás se hubieran imaginado que hoy en día serían líderes en el rubro. Unidas por el talento comercial y el buen gusto, madre e hija crearon Blühend, la empresa familiar que hoy en día es la marca fetiche de las artistas pop. 

Como actividad principal, Blühend se dedica al diseño y la fabricación de su propia línea de joyería, combinando cristales con Plata 925 y algunos ítems con Oro 18k. Utilizan únicamente cristales auténticos europeos, de la mejor calidad del mundo, que provienen de Austria y de República Checa. Gracias a su trabajo, compromiso y honestidad comercial, lograron asociarse a Swarovski como únicos representantes oficiales en el país.  

La pandemia las llevó a buscar un nuevo horizonte dentro de la marca, y luego de meses pensando cómo continuar, decidieron realizar la customización de productos. Con el arte y la creatividad que caracteriza a Blühend, intervienen objetos, lanzaron su propia línea de remeras, llaveros y marroquinería. Luego de años de trabajo en conjunto, madre e hija lograron un fuerte posicionamiento en el rubro, haciendo que su producto esté al alcance de todos.  

Hablamos en exclusiva con Silvana y Sofía, quienes nos cuentan de su experiencia haciendo arte a través de cristales. 

• ¿Cómo nace Blühend? 

Silvana: Después de muchos años de haber trabajado en el área comercial de distintas empresas, entendí que necesitaba comenzar un nuevo camino. Al mes estaba sentada buscando qué hacer y el tema de los brillos llegó porque una amiga me había regalado una banderita con cristales Swarovski que me encantó. En ese entonces creía que el tema cristales era para pocos, un prejuicio mío. Empecé a buscar oportunidades de mercado, nichos inexplorados. Les envié un correo electrónico a Swarovski y me dijeron que podía empezar a trabajar con ellos, solo que necesitaba tener una empresa registrada, una página web, y así empecé con mi trabajo de hormiga. Después de dos años ya tenía mis productos, clientes, empecé a vender joyas por mayor y encontré que el camino era por ahí. Swarovski me dio la licencia y me permitió ser su distribuidor trabajando en equipo con ellos. Tuvimos una gran expansión, sin tener mucha idea del mundo de la joyería, sino talento comercial. 

• ¿Cómo es el proceso creativo en la creación de estas piezas? 

Sofía: En lo que es joyería, trabajamos junto a las chicas de taller para diseñar nuestra línea de productos. Vemos los diseños, los cristales y definimos qué cosas se pueden llevar a cabo. 

Silvana: Nosotras tenemos distintas piezas con variedad de colores y cristales, pero siempre tratamos de optimizar el uso de lo que tenemos en stock, sobre todo porque trabajamos con cristales europeos y a veces se dificulta el tema de la importación. Las tendencias te sorprenden, el mercado responde bien y hay un poco de todo. Buscamos respetar la tendencia y el gusto del cliente, y más ahora que después de casi dos años sin eventos, decidimos encarar nuestra línea de joyería a un producto más urbano, más comercial. Cada vez más nos adaptamos al contexto, a la sociedad. 

• ¿Qué aspectos consideran en la customización de productos? 

Sofía: Cuando hacemos productos 100% customizados, es el cliente quien nos dice qué idea tiene, qué es lo que quiere hacer, y con qué presupuesto cuenta. Primero nosotros hacemos una muestra y orientamos al cliente sobre la cantidad de cristales que necesitamos. Le ofrecemos opciones hasta llegar al producto, adaptándonos siempre a su necesidad. 

Maru Venancio, la estilista de Lali Espósito, vio en nuestro Instagram unas botas con cristales de Dua Lipa que habíamos compartido como referencia. Le contamos que ese modelo no lo habíamos hecho nosotras, pero que si querían podíamos customizarlas para el Disciplina Tour. Fue todo un desafío y en la intervención usamos casi 9500 cristales. Después nos pidieron hacerle el vaso térmico, para el que usamos más de 7000 cristales con un diseño de cadenas. Todo es trabajo manual y lleva mucha tiempo y dedicación al poner cristal por cristal. 

Los cristales en los ojos son un look característico de Emilia Mernes y la acompañamos en este detalle desde 2019. Si bien en esa época no estaba de moda usar cristales en el rostro, pudimos hacer esta acción a través de su maquilladora Juicy Make Up. Después surgió la idea de hacer la cápsula en conjunto, un producto que viene con un kit de cristales para colocarlos debajo de los ojos. También customizamos su micrófono con aproximadamente 4500 cristales. 

Para “¿Quién es la Máscara?” nos contactó la estilista de Natalia Oreiro. Nos comentó que les encantaba nuestros cristales y querían hacer una tablet intervenida para el programa. Nos copó la idea y nos sumamos. Ellas nos enviaron el logo, nos contaron la idea, su propuesta. Desde ahí nosotras empezamos con la producción en base al diseño y presupuesto. 

Cada proceso de customización es manual y se hace todo con cristales europeos. Para este tipo de productos lo ideal es hacerlo con tiempo, porque tenemos que considerar muchos elementos como por ejemplo que el pegamento sea el adecuado para la superficie del producto, hacemos varias pruebas para entregar un producto de calidad. Este tipo de trabajos nos encanta porque son desafíos, cosas distintas, cada trabajo es diferente y 100% personalizado. Está bueno hacerlo porque conocemos la historia de cada cliente y de cada pedido. Para nosotros es un trabajo, pero para el cliente es algo especial en un momento importante de su vida. 

Silvana: Antes pensaba que los cristales eran un producto relacionado al glamour, y después me di cuenta que es un producto que está al alcance de todos. Detrás de este trabajo hay un mensaje de poder lograr tener algo deseado y de calidad. Es muy lindo poder acompañar a nuestros clientes, algo así como un sueño cumplido. 

• ¿Cómo es la experiencia de trabajar en conjunto con Swarovski? 

Silvana: Ellos tienen su sede en Austria, en la bajada de unas colinas donde hay mucha agua de hielo que es lo que ellos necesitan para la producción de cristales. Yo llegué a ellos por email, me contactaron con su delegación en San Pablo que maneja todos los clientes de Latinoamérica. Así que al tiempo nos invitaron a visitarlos para un entrenamiento, fue un placer. Poder disfrutar y vivir esa experiencia fue increíble. Cuando estuve ahí me di cuenta de lo que habíamos logrado. Gracias a mi trabajo, a nuestra confianza hoy en día puedo tener un socio como Swarovski. Si bien pagamos un fee por la licencia, es poner tu imagen, tu impronta, tu compromiso, responsabilidad y honestidad comercial. Eso fue un gran logro en lo personal. 

• ¿Por qué creen que Blühend logró pisar fuerte en el rubro? 

Silvana: Creo que nosotros logramos un posicionamiento en el rubro que no logró ninguna otra marca. Hoy vamos a exposiciones de joyería, relojes, marcas importadoras y estamos entre los 25 líderes. Blühend marca tendencia y estética dentro de las marcas líderes, en un rubro que es muy antiguo por así decirlo. Nosotros nos enfocamos mucho en la imagen, el marketing, y en comunicar de una forma distinta. Pudimos captar a toda esa clase media que deseaba tener algo lindo y ahora lo puede tener, porque son productos que están al alcance de todos. Podríamos subir los precios y posicionarnos en el segmento de lujo, pero nos dimos cuenta que ese segmento no es nuestro cliente. Nuestro rango es un segmento de clase media que desea tener algo lindo, y tenemos un rango de precios para cualquiera que quiera conseguirlo. 

Sofía: Nosotros por vender algo personalizado no cobramos un extra. Se cobra de acuerdo a los materiales que se usan, la complejidad de la mano de obra y la cantidad de cristales que se utilizan. Eso es lo que marca el valor del producto. Cada producto customizado es un trabajo de mucho valor personal, de quien lo hace, más allá de lo económico. 

• ¿A dónde les gustaría llegar en un futuro? 

Sofía: Hoy en día podemos ver nuestro posicionamiento gracias a todo lo que trabajamos durante la pandemia. Durante los meses de confinamiento no vendimos nada, y teníamos empleados a los que pagar. Gracias al requerimiento de nuestros clientes nos dimos cuenta que el camino era la customización de productos personalizados. Empezamos a confiar en nuevos productos, lanzamos barbijos, hicimos una línea de remeras con cristales y después comenzaron a surgir nuevos trabajos. 

Silvana: Creo que Blühend es una marca que tienen los pies sobre la tierra, y queremos llegar a donde nos lleve el trabajo. Desde lo personal, yo quiero que nuestra empresa esté sólida, poder sortear todas las dificultades trabajando en Argentina con productos importados. Mi gran aspiración es que la gente que trabaje conmigo y mis hijos puedan progresar, que nuestros clientes nos vinculen con productos de calidad y de buen servicio. El abanico es infinito, el trabajo es muy dinámico y la variedad de productos te permiten ver un universo lleno de cristales.