El hot yoga es cualquier tipo de yoga que se practica en una sala climatizada a una condición de 40 grados de temperatura y un 70% de humedad. La idea de este tipo de yoga es de reproducir las condiciones de la práctica en India, que permite una mayor apertura del cuerpo gracias al calor, que ayuda a profundizar en las posturas o asanas.
Según los expertos, los principales beneficios del Hot Yoga son el aumento de la capacidad pulmonar, mejora de la densidad osea y regular los niveles de glucosa en sangre.
¿Qué es el Hot Yoga?
El Hot Yoga se originó en la década de 1970 y fue desarrollado por Bikram Choudhury. Se lleva a cabo en una habitación con temperatura elevada, generalmente alrededor de 40 grados con una humedad relativa del 70%. La clase de Hot Yoga consiste en una secuencia específica de 26 posturas y dos ejercicios de respiración, cada uno de los cuales se realiza dos veces.
Beneficios del hot yoga para la recuperación física
Mayor Flexibilidad: El calor en el estudio ayuda a aflojar los músculos y las articulaciones, lo que facilita la realización de posturas que aumentan la flexibilidad de todo el cuerpo.
Desintoxicación: La transpiración profusa durante la clase ayuda a eliminar toxinas del cuerpo, lo que puede ser beneficioso para aquellos que buscan desintoxicar después de un período de inactividad física.
Fortaleza Muscular: El Hot Yoga trabaja todos los grupos musculares, lo que ayuda a tonificar y fortalecer el cuerpo de manera equilibrada.
Aumento del Ritmo Cardíaco: La práctica aumenta la frecuencia cardíaca de manera similar al ejercicio cardiovascular, lo que puede contribuir a la pérdida de peso y a mejorar la resistencia cardiovascular.
Mejora de la Postura: El enfoque en la alineación adecuada y la conciencia corporal en el Hot Yoga puede ayudar a corregir problemas posturales.
Consejos para Practicar Hot Yoga
- Hidratación: Debido al calor y la transpiración intensa, es crucial mantenerse hidratado antes, durante y después de la clase.
- Ropa Adecuada: Usa ropa ligera y transpirable que te permita moverte con comodidad. Evita las prendas que retengan el calor.
- Respetar los Límites: Escucha a tu cuerpo y no fuerces las posturas. Los principiantes deben comenzar con clases más suaves y avanzar gradualmente.
- Alimentación: Evita comer comidas pesadas antes de la clase, ya que el calor puede hacer que te sientas incómodo.
- Reposo Posterior: Después de la clase, tómate un tiempo para descansar y rehidratarte.
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