Estos son los beneficios del aceite de comino para el pelo

El aceite de semilla de comino negro es un derivado de una planta con flores, también conocida como “Nigella Sativa”. Según la tradición, hace más de 1300 años, el profeta Mahoma llegó a la convicción de que “el comino negro cura todas las enfermedades, excepto la muerte”. Este tipo se utilizó durante siglos como medicina y alimento, y cuenta con una larga historia culinaria especialmente en países de Oriente y Mediterráneo, pero recientemente ganó popularidad como ingrediente para el cabello. 

Las semillas se pesan en frío para obtener el aceite sin que se pierdan o alteren los compuestos beneficiosos, ya que se compone en un 50% de ácido linoleico, un ácido graso esencial de la familia omega-6; un 20% es ácido oleico, monoinsaturado que resulta beneficioso para el sistema cardiovascular; y contiene compuestos polifenólicos antioxidantes. 

En lo que se refiere al cuero cabelludo, los expertos recomiendan que, a la hora de aplicar cualquier tratamiento, es aconsejable primero consultar con un dermatólogo. El aceite de semillas de comino negro es un activo que tomó gran relevancia en el último tiempo, ya que entre sus propiedades destaca su poder antiinflamatorio y antioxidante, las cuales ayudan a mejorar la circulación sanguínea del cuero cabelludo, aportando luminosidad e hidratación al pelo. 

Este tipo de aceite puede contribuir a suavizar, aumentar el brillo y potencialmente ayudar a mejorar el cabello dañado. Resulta un ingrediente perfecto para aplicarlo sobre el cuero cabelludo y controlar la caída de pelo. Al comprar aceite de semilla negra, conviene prestar atención a la calidad y elegir solo aceite prensado en frío de alta calidad y de cultivo ecológico. 

En el caso de tener problemas de la piel, los expertos recomiendan aplicarlo con moderación en las áreas afectadas. Para el cuidado del cabello, se recomienda poner un poco de aceite de comino en las puntas del cabello y masajearlo después de cada lavado. En el caso de que estés transitando un embarazo, se recomienda abstenerse de usar aceites esenciales.