Este año, el pelo se convierte en el lienzo perfecto para expresar identidad y estilo. Atrás quedó la rigidez de los peinados estructurados: la nueva era celebra la libertad, la textura y la autenticidad. Desde el regreso de los cortes noventeros hasta interpretaciones modernas del bob clásico, la tendencia es clara, todo se vale.
SOFT BOB
Uno de los favoritos indiscutidos es el soft bob. Este corte, que va a la altura de la mandíbula, se impone por su versatilidad. Es ideal para quienes buscan sofisticación sin esfuerzo, y se adapta tanto al alisado extremo como a las ondas desordenadas.
PIXIE CON FLEQUILLO
El pixie con flequillo largo vuelve con fuerza. Además, estilistas lo recomiendan por su capacidad de realzar las facciones y otorgar un toque moderno con mínimos cuidados.
SHAG
Para las amantes del largo, el shag con capas suaves es el nuevo must. Inspirado en los cortes rockeros de los setenta, pero adaptado a las tendencias contemporáneas, aporta movimiento y frescura sin sacrificar longitud. También se puede combinar con un flequillo cortina.
En definitiva, los cortes de esta temporada reflejan las tendencias de moda que son tan versátiles que se adaptan a varios estilos y gustos, teniendo en cuenta la forma de la cara, el tipo de pelo, y por supuesto los intereses personales.
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