Máxima Zorreguieta demuestra su simpatía por Grecia con un diseño de Costarellos e históricas joyas

Máxima Zorreguieta y su esposo, el Rey Guillermo Alejandro de los Países Bajos, se encuentran en Grecia en el marco de una visita de Estado. Durante su primera jornada, la reina consorte enamoró a los griegos con un diseño bicolor, en tonos tierras en contraste con el blanco. Para la cena de gala eligió un imponente diseño de Costarellos, la firma creada por el alemán Christos Costarellos que debutó en la moda griega en 1998. 

Si hay algo que los reyes de los Países Bajos aman hacer, es disfrutar de unos días en Grecia. Cada verano, Máxima y Guillermo Alejandro visitan el país helénico, y se trasladan a su mansión en Doroufi, para descansar en unas vacaciones totalmente privadas. “Venir a Grecia es como volver a casa” expresó el monarca holandés durante su encuentro con la primera presidenta mujer, Sakellaropoulou; y durante la cena de gala agregó: “Grecia es un país orgulloso y seguro de sí mismo. Y con razón: la "idea de Europa" no habría existido sin el redescubrimiento de la civilización griega”. 

Para la cena de gala en el palacio presidencial de Atenas, Máxima Zorreguieta quiso demostrar su simpatía por Grecia a través de la moda. Para la ocasión, la reina consorte de los Países Bajos lució un vestido de Costarellos en color bordó que combinaba terciopelo y guipur, de manga corta y cuello alto. 

Máxima de Holanda combinó su look con una tiara con 385 piedras (entre diamantes y rubíes), un brazalete a juego, aros, anillo, y un impresionante broche ‘devant de corsage’ en la cintura. La histórica tiara fue realizada en 1888 por la joyería Mellerio, cuando el rey Guillermo III de Holanda la encargó para su esposa, la reina Emma.  

Respecto a la joyería, lo curioso es que la argentina eligió la misma tiara que lució su suegra en 1962, para asistir a la cena previa de la boda de Juan Carlos I de España y la Reina Sofía. 

 

At. Redacción Marie Claire